Mostrando entradas con la etiqueta infraestructura. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta infraestructura. Mostrar todas las entradas

jueves, 30 de diciembre de 2021

Las Terrenas en el 2022 (1, 2, 3 y 4)

 


Las Terrenas y el 2021 (1 de 4)

Por José R. Bourget Tactuk

El 2021 llega a su fin y Las Terrenas puede celebrar grandes victorias y reflejar profundas esperanzas.

Sería difícil pensar que de los 158 municipios y 235 distritos municipales que hay en el país, que Las Terrenas no haya sido el más bendecido de todos.  La mayoría de los negocios locales (restaurantes grandes y pequeños, villas, hoteles, ferreterías, colmados, supermercados, ingenieros, agrimensores, bioanalistas, laboratorios clínicos, clínicas, albañiles, electricistas, plomeros, carpinteros, talleres de ebanistería, pintores, casas de cambio, wachimanes, jardineros, gasolineras, talleres de mecánica, etc.) no sucumbieron al COVID y a muchos de ellos les ha ido mucho mejor que el promedio provincial, regional y nacional.

Desde el comienzo de la pandemia Las Terrenas se convirtió en el refugio de los dominicanos de todas las provincias y, según concluye el segundo año de la misma, es también el refugio de muchos extranjeros de las nacionalidades tradicionalmente representadas y de otras nuevas.

(foto tomada de Trip Advisor)

A pesar de los aumentos en los materiales de construcción existen hoy en día cuchocientas construcciones de villas, condominios y apartamentos, hay por lo menos 10 lomas en demolición para sacar piedras y caliche y la venta de terrenos y apartamentos no ha disminuido y, quizás, ha crecido exponencialmente.  Es difícil encontrar un apartamentito de precio razonable, casi todos los disponibles están rentados y por doquier se ven nuevas construcciones para proveer respuesta a la demanda.  No hay una sola esquina en cualquier parte del municipio que no muestre mejora, crecimiento, ampliaciones y nuevas construcciones.  A Las Terrenas le ha caído muy bien la pandemia.

Pero, aparte del sentido de “refugio” o de “sanatorio” que pueda representar a nacionales y extranjeros en el contexto de la pandemia, en Las Terrena se respira un aire de frescura, de prosperidad, de progreso, de tranquilidad, de esperanza y de alegría.  Las iglesias siguen llenas y los bares también.  Las excursiones aumentan y en las redes sociales donde los extranjeros escriben y preguntan se ven más y más indagaciones de personas que quieren venir para aquí y escapar la atmósfera opresiva que muchos sienten en sus países de origen (Canadá parece ser un ejemplo notable, al que algunos han comenzado a llamar “dictadura”).

Hay que felicitar al alcalde Willy Esteban por haberle dado un lavado de cara al municipio que se refleja no solamente en mejoras notables en los aspectos sociales y culturales, sino también en el colorido y movimientos internos.  El el rey del jabón de cuaba.  Igualmente ha logrado que muchos empresarios e individuos se hayan animado a contribuir de diversas formas al lavado de cara y a la oferta de oportunidades novedosas.  El alcalde ha logrado crear un sentido de pertenencia en muchas personas pudientes, individuales o empresariales, de tal forma que por muchos de los sitios del casco urbano se ven sus contribuciones.

El inversionista nativo no se ha quedado atrás, desde el pequeño comerciante hasta los grandes financistas.  Se habla de pequeños negocios de igual forma como se habla de proyectos de cientos de apartamentos y/o villas.  Las calles están repletas de personas locales haciendo negocio y de nacionales comprando y alquilando, al igual que es notable ver a extranjeros visitando, consumiendo y soñando con el paraíso.  Ningún desastre natural mayúsculo llegó a nuestras costas y montañas y algunas condiciones extremas que nos afectaban (como el humo constante del vertedero o la ausencia de un hospital municipal) parecen haber sido parte de una pesadilla ya casi olvidada.

Es por ello que el 2021 cierra, en la mayoría de los casos, con un sentido de bonanza, de cambios positivos y de esperanzas.

Enhorabuena, terrener@s!!

EN LA PROXIMA ENTREGA:  En Las Terrenas aún existen condiciones y desafíos lastimosos.  A pesar de las apariencias, las condiciones estructurales, fundamentales y sistémicas no han cambiado mucho.  ¿Cuáles son y qué representan para Las Terrenas en el 2022?

=======================================

Las Terrenas en el 2022 (2 de 4)

Por José R. Bourget Tactuk

De todas las malas palabras que se pueden decir sobre el crecimiento económico la peor es “infraestructura”.  Una de las maldiciones en toda comunidad progresista es la ausencia de personas calificadas que puedan llamar atención a los peligros, que puedan poner nombre a las variables destructivas y que se atrevan a sugerir límites a la expansión desenfrenada, sin control y sin planeamiento.  "Infraestructura" se convierte entonces en una "mala" palabra para los que ignoran las respuestas a los desafíos que crea.

Las Terrenas del futuro?  Actualmente, Barcelona, España.

Las Terrenas ha crecido sin límites, sin control y sin planeamiento.  Eso ha beneficiado a MUCHA gente, pero ha corroído muchas de las razones fundamentales por la que miles de nacionales y extranjeros han escogido este pedazo de paraíso como su lugar para vivir e invertir.  Los que tienen visión 20/20 para cobrar dólares, euros y pesos tienden a ser miopes cuando se trata de entender las terribles consecuencias del crecimiento desenfrenado y sin planeamiento.  Por ejemplo, rellenar los humedales con caliche puede crear una riqueza inmensa para un inversionista que compra barato y vende caro.  Esa es la historia de Las Terrenas en los últimos 30 años.  Pero esos humedales eran la vida y el sustento de la calidad del agua para las muchas playas que nos rodean.  Aunque ya no hay terrenos baratos en Las Terrenas (comparado a 10 o 20 años atrás), la demanda sigue siendo alta y muchos han sacado mucho$ pece$ pescando en río revuelto.

Hablar de infraestructura es importante porque al crecer y seguir creciendo, al expandir la zona urbana y aprobar proyectos de 20, 50, 100, 500 villas o apartamentos, el que no es miope tiene que preguntarse por obligación las siguientes preguntas lastimosas:

  •  ¿De dónde vendrá el agua para las necesidades básicas y de lujos de todas esas personas adicionales?  De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, una persona requiere 100 litros de agua al día tanto para consumo como para higiene.  Con 30,000 habitantes (est.) Las Terrenas consume entonces 3,000,000 de litros al día.  El acueducto actual no entrega eficiente y efectivamente esa capacidad.  Cuando el presidente Leonel Fernández inauguró el acueducto en el 2011 se anunció que supliría las necesidades de 42,000 personas y que tenía dos tanques de reserva, uno de un millón 480 mil galones, y otro de hormigón armado con capacidad para 300 mil galones de agua (el equivalente a casi siete millones de litros).  Eso querría decir que Las Terrenas produce un poco más del doble (siete millones de litros) de lo que necesita para 30,000 habitantes (3 millones de litros) en un día.  Pero, ¿quién cree eso?  ¿A cuántas personas les llega el agua, con qué frecuencia y, más importante, de qué calidad? Si a Las Terrenas se le añaden 1000 casas para unas 4,000 personas que en un día requerirían 100 litros cada una (400,000 litros al día), ¿de dónde saldrá esa agua adicional, quién la pagará y qué costo implicaría llevarla hasta esos nuevos hogares?
  • ¿Dónde irá a parar toda la basura que producirán y cómo se manejarán los desechos sólidos?  En el país se producen 16,000 toneladas de basura al día lo que para una población de 11 millones implica que cada bebé, niño, joven y adulto produce unas tres libras de desechos sólidos CADA DIA.  Ese podría significar que en Las Terrenas se producen unas 100,000 libras de basura al día, el equivalente a 50 toneladas.  No toda termina en el botadero municipal.
  • ¿Qué será necesario tener para proveer alimentos a tales personas y a los que ya están?
  • Por dónde andarán los vehículos, motores y quads y dónde se estacionarán?
  • ¿Cuánto más transporte, caminos y carreteras serán necesarios?
  • ¿Cuántas más habitaciones “baratas” serán necesarias para los jardineros, personal doméstico, wachimanes, colmaderos, choferes, deliveries y todos los que tendrán que formar parte de la cadena de servicio para los miles de nuevos habitantes?  Mientras más alta la demanda mayor será el costo de la oferta y todo se encarecerá.
  • ¿Y qué se hará con la inmensa cantidad de toneladas cúbicas de heces fecales que indudablemente terminarán en el subsuelo, en ríos y lagunas y en todo el alrededor?  En promedio, una persona produce unos 14 onzas de caca al día o 6 lbs a la semana, lo que equivale a 320 libras en un año. Una casa en la que vivan 4 personas producirían 1280 libras de caca en un año.  Si hay 1000 casas adicionales en Las Terrenas dentro de los próximos 3 años para el 2025 esas mil casas adicionales producirían (1280x3x1000) el equivalente a 3,840,000 libras de caca.  Actualmente, con 30,000 habitantes Las Terrenas produce 40 millones de caca al año.  ¿Dónde irá a parar toda esa caca y cómo afectaría las aguas subterráneas, los ríos, lagunas y las playas?

Todo el crecimiento que ha ocurrido en Las Terrenas en los últimos 30 años (comienzo del boom turístico) ha sido sin numeritos.  O sea, nadie se ha preocupado de acumular la data necesaria para estimar, calcular, predecir y ayudar a determinar el impacto de toda la actividad humana en la zona.  Por eso es que la palabra “infraestructura” es una mala palabra, porque habría que ser miope para no ver que toda la expansión, crecimiento y mal llamado desarrollo de los últimos 30 años y el que se proyecta para los próximos cinco es pura y simplemente insostenible (otra mala palabra).

 

Poca gente en Las Terrenas entiende que lo que nos está ocurriendo es reflejo de todos los aspectos negativos en el crecimiento poblacional alrededor del mundo y aunque muchas grandes y pequeñas ciudades han comenzado a cambiar los patrones de crecimiento y a promover BIENESTAR humano por encima de crecimiento económico, aquí en Las Terrenas eso no ha ocurrido y no hay visos de que ocurra (espero estar equivocado).


Son preguntas lastimosas, pero al entrar en el 2022 y al considerar el futuro sostenible de Las Terrenas debemos entender que "infraestructura" es un término obligado si deseamos crear bienestar y no solamente llenar de caliche los humedales que nos quedan.

EN LA PROXIMA ENTREGA:  Los puntos neurálgicos de Las Terrenas y lo que nos enseñan sobre los desafíos y oportunidades del 2022.


=================================

Las Terrenas en el 2022 (3 de 4)

Por José R. Bourget Tactuk

Una neuralgia es un dolor, a veces punzante, que ocurre en la cara, el cuello o el cráneo, generalmente debido a una compresión, irritación o infección en los nervios.  Una neuralgia es molestosa, dolorosa, incómoda y potencialmente muy peligrosa.


Un “punto neurálgico” puede ser un término médico, pero también se utiliza para identificar condiciones que se consideran críticas o decisivas sobre una situación, un asunto o un problema.  En una comunidad siempre hay puntos neurálgicos que son fácilmente identificables por todos, apuntan a condiciones molestosas o indeseables o a la presencia de factores que ameritan respuestas, mejoras o soluciones.  No hay municipio, ni organización, ni empresa, que no tenga puntos neurálgicos y Las Terrenas, a pesar de todos los factores hermosos, atractivos y positivos que posee, los tiene en abundancia.

Un ejemplo de un punto neurálgico en Las Terrenas es el espacio de calle de unos 50 metros entre el cementerio y yendo hacia el este hasta la parada de taxi.  Cuatro alcaldes y 12 años de tiempo han transcurrido desde que empezó el problema y la acumulación de agua, presencia de basura, el tránsito congestionado, el estacionamiento inaceptable, los ruidos constantes y la simple fealdad del espacio persisten.  No hay murales que puedan ocultarlos.  Es punto neurálgico es visible, incómodo, apestoso, feo y amerita una solución.  Es un punto neurálgico notable porque un destino turístico como este no puede tener un cuello de botella tan indeseable y molestoso como ese.


Otro punto neurálgico es el tema del estacionamiento de vehículos motorizados.  No hay espacios suficientes, se desperdicia el poco espacio que hay porque la gente estaciona como puede o como le da la gana, a veces cinco motores ocupan un espacio que podría dar cabida a varios vehículos, no hay zonificación ni identificación de zonas de estacionamiento y como el público estacione sin reglas y sin detalles a veces se afecta el mismo tránsito vehicular y hasta la seguridad peatonal.  Con el incremento de vehículos y motores, al igual que el aumento del turismo interno, este punto neurálgico provoca que el casco urbano se convierta en un constante dolor de cabeza y que la calidad de vida en la zona se reduzca considerablemente por el ruido, la contaminación y los peligros que conllevan.

Otro punto neurálgico son los vertederos informales.  Es increíble que desde el comienzo del municipio el 19 de septiembre del 1996 (hace 25 años), el sistema de manejo de los desechos sólidos sigue siendo el mismo:  funditas dejadas en las esquinas.  En 25 años de historia municipal no se ha establecido un sistema efectivo, eficiente, limpio, pagado y bien manejado de manejo de los desechos sólidos.  Las ratas y los perros ayudan al manejo comiendo y, por lo tanto, reduciendo la cantidad de basura que llega al botadero, mientras que las que queda en las calles es recogida por el heroico personal de recogida de basura municipal que utiliza ahora nuevos camiones recolectores.

El que escucha la radio en LT, el que participa en las conversaciones en las calles y el que está familiarizado con los temas municipales siempre escucha la misma cantaleta sobre los mismos temas:  la basura, el tránsito, los camiones en la carretera a Sánchez, los camioneros transportando sin cubierta, el DIGESETT, la P.N., el mal uso de los espacios públicos, las construcciones al lado de los ríos y cañadas, los ruidos extremos, los bares en los barrios y sus abusos, los puntos de drogas, problemas con el internet, con la luz, con el agua, los abusos del BTA, los motoconchistas temerarios, la explotación sexual infantil y juvenil y tantos otros temas. 

Para algunos turistas, algunos de esos puntos neurálgicos representan el colorido y atractivo del lugar, una mezcla de viejo oeste con controles mínimos y por eso vienen y seguirán viniendo.  Sin embargo, para la vida en comunidad los puntos neurálgicos reducen significativamente la calidad de vida, algunos más que otros.  Para ser un pueblo tan chiquito la cantidad y complejidad de estos puntos neurálgicos pueden ser frustrantes.  Han sido la causa de que muchos migrantes y personas con capacidad de invertir se hayan ido del lugar, como es también la causa de que algunos que nos visitan decidan no regresar.  Muchas de esas condiciones han causado trastornos de salud en muchos residentes, o pérdidas financieras a otros.


Reconocer los puntos neurálgicos en una comunidad son importantes porque ayudan a identificar la capacidad interna (dentro de la alcaldía) para afrontar sus propios problemas, denotan la presencia o ausencia de personal técnico y de recursos que ayuden a confrontarlos, miden la “temperatura” de la voluntad de la administración edilicia para confrontarlos y, más que nada, demuestran las condiciones entre los ciudadanos quienes muchas veces son la causa de su existencia.  Ninguno de los puntos neurálgicos en Las Terrenas son particulares a Las Terrenas.  Estos existen en todas partes del mundo donde también existen todo tipo de técnicas, estrategias, recursos, conocimientos y prácticas para afrontarlos.  No somos los únicos que hemos tenido tales problemas, pero aún nos faltan las estrategias eficientes, efectivas y sistémicas para responder a ellos.

En una entrega anterior de esta serie decíamos que el alcalde Willy Esteban ha sido el que mejor le ha lavado la cara al municipio en tiempos recientes, hasta tal punto que es fácil olvidarse (o querer olvidarse) de tales puntos neurálgicos.  Sin embargo, la verdad es que los puntos neurálgicos históricos (y otros nuevos) permanecen, abundan y parecen inalterables.  No es culpa personal del alcalde, quien ha dado visos de visión y cometido, sino que más bien es una demostración más de las condiciones sistémicas del municipio, muchas de las cuales podrían ser resueltas con valentía y presteza si hubiera ya en su sitio un adecuado ordenamiento municipal.  Para lograrlo, el Concejo Municipal debe trazar las pautas claves, que sean bien informadas, demuestren factibilidad técnica y sean valientes. 


La situación general es también indicativa de una ciudadanía que debe asumir, con conocimiento y práctica, su responsabilidad para transformar su espacio común en un espacio de mejor vida y mayor bienestar.  Los ciudadanos a menudo se quejan, pero ellos mismos son los causantes de los problemas que les afectan.  El balance perfecto entre responsabilidad ciudadana y capacidad edilicia es lo que muchas veces ayuda a resolver los puntos neurálgicos, pero parece que en Las Terrenas nos hacen falta ambos.

Después de 25 años de vida municipal es tiempo de que la mayoría de esos puntos neurálgicos dejen de existir y, ciertamente, constituyen un gran desafío para Las Terrenas en el 2022.

=============================

Las Terrenas en el 2022 (4 de 4)

Por José R. Bourget Tactuk

“Todos los monopolios son detestables, pero el peor es el del poder” (J.B.)

La electricidad es el motor del progreso.  En Las Terrenas la electricidad es distribuída por la Compañía de Luz y Fuerza de las Terrenas, S.A. (LyF), una empresa creada en el 1992 y que comenzó sus servicios en el 1994.  Según el portal de la empresa, “desde entonces ha prestado servicio a más de diez mil clientes residenciales, hoteleros y comerciales, interconectados a sus 350 kilómetros de líneas de


media tensión, que en la actualidad consumen 2.5 millones de KWHs por promedio por mes.”  La empresa es dirigida por el Ing. José Oscar Orsini Bosch, para mi una de las personas más calificadas y conocedoras del tema tanto al nivel local como en el nivel nacional.  Yo espero, que luego de 8 años de un gobierno contrario a sus intereses, que el gobierno actual del PRM utilice los conocimientos y experiencias del ing. Orsini para ayudar a producir una respuesta efectiva técnicamente, justa para los usuarios y beneficiosa para todas las partes envueltas.  La respuesta no es lo que ha sido desde el 1994, pero puede ser muy diferente y mejor a partir del 2022.

En la segunda entrega de esta serie de cuatro escribía sobre los factores claves de la infraestructura y dejé fuera a la electricidad por considerarla meritoria de un tema aparte.  Soy casi un neófito en cuanto al tema eléctrico y no soy ingeniero eléctrico ni nada que se parezca, por lo que me limito a las implicaciones sistémicas para el desarrollo comunitario, integral y sostenible.

En el último año en particular ha sido notorio la cantidad de apagones.  Muchos de ellos provienen de causas externas a la distribuidora, pero es innegable que hay muchos factores técnicos internos:  redes en necesidad de reemplazo, equipos obsoletos o anticuados (como los cutouts) y otros que la empresa debe conocer bien.  Hace varios años escuché que unos US$4 millones serían necesarios para modernizar las redes, lo que ahora deben ser unos US$10 millones o más.  Pero, lo importante de esta situación es obvia, si Las Terrenas ha de crecer y expandir, ¿cuál es la capacidad de distribución y entrega y cuáles serían las consecuencias para el sistema en general?  Igualmente, ¿cuál es el sistema eléctrico que más nos conviene, el que hemos tenido desde el 1994 o es tiempo ya de repensarlo y producir alternativas viables?

Soy de los que creen que los apagones seguirán y no necesariamente por causa de la red nacional de la cual depende LyF.  Creo que para responder al crecimiento actual y al que se espera deberán ocurrir grandes transformaciones por encima de las redes que nos vienen desde Sánchez.  Si el costo de expansión del sistema dentro de las capacidades actuales es elevado es porque las capacidades intrínsecas existentes son limitadas e inadecuadas.  También entiendo que la empresa carece del capital para poner a Las Terrenas en el siglo XXII de la oferta eléctrica.  Si es así, ¿qué se puede hacer?

En noviembre pasado hablaba de la posibilidad de crear una cooperativa eléctrica


(https://terrenero.blogspot.com/2021/11/cooperativa-electrica.html), porque la pregunta clave no es si hay un permiso de concesión provisto por el Estado (tal como había una “concesión” hacia la empresa que manejaba la autopista a la capital), el cual sí lo hay.  La pregunta clave es ¿cuál es el servicio eléctrico que más le conviene actualmente y al futuro del municipio más progresista del nordeste?  No nos conviene el más deficiente, ni el más caro, ni el más injusto, ni el más limitado.  Nos conviene un sistema eléctrico del “primer mundo” por así decirlo.  Creo que el sistema actual no responde ni a las necesidades del momento ni a las del futuro, además de que deja fuera opciones alternativas usando recursos naturales.  Por eso hay que agarrar al toro por los cuernos (como ocurrió con la autopista y el BTA) y buscarle una solución.  Este es el momento clave para hacerlo.

En ese sentido, la empresa LyF se convierte en una analogía de la realidad del desarrollo integral y crecimiento económico del municipio.  El municipio tiene una capacidad de manejo limitada y hasta obsoleta, carece de condiciones técnicas y de una visión de desarrollo integral, pero sigue operando y lo seguirá haciendo.  Han hecho caso omiso a los puntos clave de la infraestructura y los puntos


neurálgicos persisten y aumentan.  La falta de un ordenamiento territorial y la presencia de limitaciones extremas a raíz de los abusos y malas prácticas del gobierno municipal actual y de los anteriores, al igual que la explotación criminal de los recursos naturales y la cantidad de permisos otorgados sin ton ni son, en ausencia de una clara visión de desarrollo, nos lleva a dudar de la viabilidad del municipio, algo muy peligroso para todos (ver https://terrenero.blogspot.com/2021/12/medio-ambiente-otra-vez-mi-voz-de-alerta.html).   Es posible el crecimiento económico, es posible el desarrollo integral y es posible balancear tanto la explotación de los recursos naturales como la turística, pero eso no es lo que ocurre en el presente.  En Las Terrenas parece gobernar el dólar por encima del bienestar y de la calidad de vida sostenible.

Declaro mi exageración al decir que más que en cualquier gobierno municipal anterior, vivimos en medio de una total explotación criminal, sin visos de corrección.  Es como las ampliaciones a las redes que hace LyF para responder a las demandas de crecimiento actuales, son parchos, sobre parchos, sobre parchos y eso tendrá implicaciones para el resto del servicio en todo el municipio.  No es que la empresa es criminal e ignorante, como la alcaldía no es ni criminal ni ignorante, sino que la capacidad de alterar las condiciones actuales para transformarlas en la dirección deseada es extremadamente limitada.

Entonces el desafío para Las Terrenas en el 2022 incluye la pregunta:  ¿tenemos un sistema eléctrico a la altura de lo que Las Terrenas necesita para su crecimiento actual y futuro, o necesitamos considerar alternativas más sostenibles para el municipio?  De igual forma, ¿será posible tener un futuro sostenible en Las Terrenas cuando las autoridades edilicias toman decisiones en ausencia de un plan de desarrollo, de una organización territorial adecuada e, igualmente importante, ante la presencia de una historia harto conocida de improvisaciones, falta de planeamiento y abusos a los ecos sistemas?  ¿Cómo es posible seguir haciendo lo mismo cuando a diario nos quejamos de las consecuencias de las malas decisiones del pasado?

LyF pasó por su via crucis, perdiendo el monopolio generación-distribución.  ¿Cuál será el via crucis que lo tocará sufrir a la alcaldía para enmendar su pensar y su accionar y dirigirnos hacia un futuro sostenible, de mayor bienestar y de seguridad en todos los aspectos de la vida ciudadana?

(Lea los cuatro artículos en https://terrenero.blogspot.com/.../las-terrenas-en-el...)

La meta debe ser el bienestar humano



martes, 29 de septiembre de 2009

Lo que el Presidente no dijo

En su última visita a Samaná el Presidente Dr. Leonel Fernández describió a las inversiones hechas y por hacerse como piedras fundamentales para el desarrollo de la provincia, tratándose de infraestructuras necesarias para su desarrollo turístico y económico. Sin duda alguna, el acueducto múltiple, nuevas y mejores calles y carreteras, un mejor servicio eléctrico, desagues sanitarios, puertos, un ferry, un aeropuerto internacional, la autopista a Santo Domingo, el Boulevard del Atlántico y otras cosas más que se le ocurran harán de Samaná un lugar mucho mejor que lo que era antes. De hecho, en este año eleccionario y con 900 millones de dólares en camino no me extrañaría que otras cosas más van a surgir de aquí a mayo, todas buenas y todas necesarias para el desarrollo de este polo turístico, según dejo entrever el presidente.

Hay cosas que el Presidente no dijo.

Según Transparencia Internacional se estima que toda obra mayúscula implica que un 30% de su presupuesto final es dedicado al soborno y a la corrupción. O sea, todas esas obras gubernamentales implicará que un tercio de su costo final irá a parar no a las gentes de Samaná sino a los “pejes gordos” que trafican con la corrupción. Las infraestructuras señaladas harán posible que las dos grandes empresas claves detrás del desarrollo turístico—la construcción y las bienes raíces—serán las más beneficiadas. A nivel mundial y según Transparencia Internacional (Indices de Fuentes de Soborno), las industrias de construcción y bienes raíces están en el tope de la corrupción, acompañadas por las empresas dedicadas a las ventas de armamentos y a las ventas de petróleo y de gas.

Nuevamente, los beneficios finales a percibirse por las infraestructuras antes dichas quedarán, en gran parte, en manos de unos pocos que manejan dos de los tipos de empresas más corruptas a nivel mundial.

Igualmente, según Transparencia Internacional, la República Dominicana es percibida como uno de los países más corruptos de Latinoamericana, principalmente en lo que se refiere a altos dirigentes nacionales, a personas encumbradas en la administración pública y en dependencias del estado. Si eso es así, es de estimarse entonces que de los miles de millones de pesos invertidos en infraestructura una buena tajada quedará en los bolsillos de personas encumbradas (incluyendo secretarios de estado) por ser éstos los que manejan los fondos y los que hacen posible que se determine quién hace qué, cuándo, por cuánto y en qué manera.

El Presidente no dijo nada sobre el porcentaje del costo de la infraestructura que será dedicado al soborno, al desfalco, a la prevaricación y a los manejos turbios, acciones todas condenadas en el Código Penal dominicano.

No importa cuánta infraestructura exista o se construya, si no se invierte en la gente no habrán resultados a largo plazo ni se sacará a la mayoría de la gente de la pobreza.

El Presidente no dijo nada de la inversión en el desarrollo humano.

El Presidente no dijo nada de la inversión social en la provincia, una de las más pobres del país.

Mientras el hacha va y viene el Presidente no dijo en qué manera toda esa infraestructura cambiará el que 1 de cada 4 personas en Samaná viva por debajo del consumo calórico alimentario necesario para mantenerse vivo; ni dijo en qué manera se ocuparán 30% de la población que dice que “no tiene nada que hacer”, o cómo cambiará la cosa para el 50% de la población que dijo que en los últimos 12 meses no trabajó; tampoco dijo cómo la infraestructura ayudará a que más personan terminen la escuela primaria (sólo el 60% de la población la terminó), o la secundaria (sólo 1 de cada 5 completó la secundaria).

Parece que el Presidente no sabía que en Samaná 1 de cada dos personas es considerada pobre y que 1 de cada 10 es indigente (incapaz de sostenerse a sí misma). Parece que nadie le dijo que en Las Terrenas 12 de cada 100 niños tiene una desnutrición crónica (el promedio provincial es 11 de cado 100 niños, o sea un poco más del 10% de la población). En la provincia el 56% de los hogares son pobres y el 9 por ciento de los hogares viven bajo una pobreza extrema (menos de 1 dólar al día) y, como ejemplo, 6 de cada 10 hogares solamente tiene una letrina y 3 de cada 10 tiene un inodoro (1 de cada 10 hogares no tiene nada).

Pero si hay corrupción, si gran parte de la infraestructura y el desarrollo toma lugar en dos de los ámbitos más corruptos y si por lo menos el 30% del valor invertido queda en los bolsillos de unos pocos, entonces qué quedará para las PERSONAS en Samaná, ese 60% de pobres e indigentes, que apenas terminó la escuela primaria, los que probablemente no serán empleados en ninguna de las obras de infraestructura.

El Presidente no habló de desarrollo humano.

Qué pena. Eso es lo que más necesitamos en Samaná.

(Cifras de la Oficina Nacional de Estadística).

SIN DESARROLLO HUMANO NO IMPORTA CUANTO CREZCA LA INFRAESTRUCTURA. Infraestructuras y desarrollo humano deben ir mano a mano.

Esperamos su próximo discurso, señor Presidente, sobre las decenas de miles de millones de pesos que se invertirán en el desarrollo humano de nuestra provincia. O, simplemente, asegúrese de que la gente envuelta en las infraestructuras no se quede con un solo centavo del pueblo y use eso en desarrollo humano. Eso sería más que suficiente.

Sísifo y el Fénix

  LA DESGRACIA DE SÍSIFO Y LA PROMESA DEL FÉNIX (Escrito en el 2009) Todo el mundo tiene una idea de lo que se debe hacer en Las Terrenas. T...