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domingo, 15 de julio de 2012

El Refugio de la Mentira


Mentimos constantemente.  Lo hacemos por no saber la verdad, o por temor a las consecuencias de decir la verdad, o porque mentir es más fácil. Por encima de todo, mentimos por la más democrática de las razones:  somos humanos y los humanos mienten, queriendo y sin querer queriendo. 
La mayoría de los estudios sico-sociales revelan que detrás del deseo de engañar o de mentir se encuentra una estima propia baja.  Mentir es un mecanismo de defensa en contra del ambiente de mentiras y desengaños que nos rodea.  O sea, mentimos para defendernos de las mentiras de los demás (y de las nuestras).
A pesar de las apariencias, mentir es complicado.   Si yo digo “soy mentiroso”, ¿cuál es la verdad, que soy de verdad mentiroso o que miento al decir que soy mentiroso?  Ay, esto dá dolor de cabeza. Todos conocemos el dilema del vaso a medio llenar, el que algunos ven medio lleno y otros medio vacío.  Pero si alguien te dice una media mentira, ¿es la otra mitad toda verdad?  O si alguien te dice una media verdad, ¿es la otra mitad toda mentira?  Cualquiera sea tu respuesta una cosa es cierta, nada sustituye tan bien a la verdad como una mentira.  Lo que sé es cierto es que mentir tiene consecuencias muy penosas y autodestructivas.  Un proverbio judío reza “con una mentira suele irse muy lejos, pero sin esperanzas de volver.”  Es innegable que a los humanos nos escanta irnos de paseo muy lejos. 
En Dominicana somos maestros en el arte de la complicidad con la mentira.  Por ejemplo, sé de muchos que no saben nada de plomería, ni de electricidad, ni de albañilería, ni de pintura, pero si alguien les pregunta si pueden hacer uno de esos trabajos en seguida responden “claro que sí”.  Si alguien les pregunta si son dueños de la tierra en venta dicen que sí aunque no lo sean.  Parecería que no nos gusta ni quedar mal ni que el otro se sienta mal, por eso le decimos al otro lo que quiere escuchar y nosotros sentimos gran satisfacción mintiendo porque esa mentira hace que el otro se sienta mejor (y nosotros también nos sentimos mejor).
Nuestras mentiras más notorias posiblemente tienen que ver con la política. El próximo 16 de agosto el recién electo presidente Lic. Danilo Medina subirá su mano derecha para juramentarse como tal bajo la premisa de que los dominicanos ejercimos el voto libre y soberano y lo elegimos democráticamente.  Embuste, todo el mundo sabe cómo fue elegido, pero convertimos ese gran teatro en una mentira colectiva que satisface nuestra necesidad de vivir bajo la falsedad.  Pagar a otros, comprar cédulas, utilizar fondos públicos para hacer campaña y hacer todas las marañas posibles para ganar es parte del gran teatro de la mentira donde encontramos refugio y amparo, donde nos complace decirnos a nosotros mismos “lo logramos, engañamos pero lo logramos.”  Quisiera poder decir que eso sólo ocurrió en estas elecciones y con este candidato, pero no, es sistémico, en todos los partidos y en todas las elecciones, locales y nacionales.
El inglés Lord Chesterfield aseguró que “decir mentiras constituye el único arte de la capacidad mediocre y el único refugio de los hombres viles.”  El mentiroso vil se “infla”, se enamora de sus propias mentiras y tiende a ser un neurótico narcisista cuya misión es convencerse a sí mismo de que su mentira siempre es verdad.  En la sicoterapia se identifica el “patrón narcisista” como aquel que manifiesta “sentimientos de importancia y grandiosidad, fantasías de éxito, necesidad exhibicionista de atención y admiración, explotación interpersonal.”  El narcisista crónico se masturba mentalmente con sus propias mentiras, se refugia en el eterno vaivén de verdades a medias, convirtiéndolas en gigantes irrefutables dentro de su mente, como los molinos de don Quijote.
“La verdad siempre triunfa por sí sola, la mentira necesita siempre complicidad”, dijo Epicteto.  Entonces es posible que aquí vivamos en un pais de cómplices compulsivos, compartiendo nuestras mentiras con nuestros compañeros de vida, celebrando y disfrutando las mentiras de políticos, artistas y compañeros de trabajo.  Aunque vivamos en base a mentiras, en el fondo sabemos qué es verdad, a menos que seamos bipolares y confundamos una cosa con la otra hasta tal punto que a veces no sabemos si estamos viviendo en el refugio de nuestras mentiras o en el teatro de nuestras verdades. 
Hay algo terriblemente hermoso y humano en nuestro mentir.  El refugio de la mentira es encantador, su ulular nos atrae como sirena voraz, su abrazo es una cadena en nuestros cuellos.  Por eso mentimos cuando amamos, para liberarnos de la pasión que nos esclaviza.  Por eso mentimos cinco, diez, quince, veinte veces al día, porque vivir constantemente en la verdad nos destruiría.

martes, 23 de agosto de 2011

Emblematicología


Algunas cosas nunca cambian...

Había una vez un pueblo al lado del mar, sembrado entre los cocoteros, espejo de las olas, trovador de bachatas inéditas, parido entre cuevas, montes y pantanos, rodeado por un cinturón de jaibas y ciguapas, salcochado con el sazón de amaneceres arrolladores y besado cada tarde por el suave y tibio cantar de nacientes estrellas borrachas de amor.

El más grande con el pueblo a sus pies.
Era un pueblo vendido al mar, recorrido espeluznantemente por vacas y toros silvestres que con sus colas y cachos adornan sus calles, abastecido felizmente por el constante susurro de peos motorizados; ahi, en ese pueblo de nadie y de todos, de todo y de nada, habían cuatro pistoleros rocinantes, cada uno compitiendo por la corona más emblemática, la del supremo ejemplo de todo lo que es, puede ser, ha sido y será.

El primero de ellos era todo trueno y centellas y, según él, con la soberbia proverbial de los de su clase, partió con su rayo de luz las más recónditas oscuridades de una aldea remota, desconocida y atrasada. Lanzó sus rayos y nació el todo de la nada, todo lo que se era dejó de ser y todo lo que no se era se hizo. Es el salvador del pueblo, el creador del pueblo, el dueño del pueblo.

El Llanero Solitario
El segundo de ellos se abrió paso con su ambición: redondito, agachadito, maestro de las sombras y mago de la anticipación. Lo cubre el manto de la corrupción, lo besa la ciguapa encantada de la manipulación, su fálico es una manguera de lodo que embarra todo lo que toca, haciendo oculto de lo claro, transformando en mentiras las verdades más elementales, pero como no hay nadie mejor que él para lo que hay que hacer las masas hacen de su harina el pan nuestro de cada día.

Codicia sin frenos
El tercer vaquero es tan espectacular como los otros, llega como rey, compra, vende y convence a todo el que quiera escucharle de que es lo mejor que le ha ocurrido a mi pueblo allende al mar. Tiró 30,000 tiros, uno por cada metro cuadrado que llenó de lodo para construir sobre éste los castillos de sueño de los cientos que comprar una imagen elegante pero nefasta y con sus subterfugios financieros se dá el gusto de traer al Príncipe de los Príncipes para bendecir al descaro más emblemático en toda la historia de este lugar.

Vaca sagrada
El cuarto es una vaquera indomable, dueña de sus actos y de su boca, la que hace que los que están con ella y los que no están se pregunten en qué está, porque con una mano hace y con la otra deshace, su misión hacer amigos pasajeros de algunos y enemigos permanentes de otros. La cubre toda una catedral de oportunidades perdidas, el resultado de una ceguera monumental, de una incapacidad oculta tras coronas sórdidamente políticas. Total, no necesita a nadie y por eso al hacer deshace y cuando deshace hace lo que todo quisiéramos que no hiciera.

Cada uno de estos vaqueros es emblema de lo que pudo ser y no fue, la desgracia de mi pueblo allende al mar que en lugar de emblemas auténticos, honrados, serviciales y honestos lo que tiene son personas que tienen que alquilar pistoleros a sueldo para proclamar sombras de virtudes, reflejos de maldades conocidas pero embadurnadas del brillo de intereses comprados. Estos vaqueros indomables son una bendición para Las Terrenas porque nos ayudan a entender todo lo que deseamos evitar en nuestros líderes del futuro. 

Aunque nos cueste en el presente aprendamos la lección. El futuro merece tener a una nueva generación de jóvenes líderes que se atrevan a hacer de la honestidad su mejor amiga, que se emborrachen del honor de decir la verdad, que se embarren en la arena del servicio desinteresado y que se atrevan llevar ante el altar del honor a la novia más bella y deseada: mi pueblo allende al mar.

jueves, 14 de octubre de 2010

Y Ahora, Quién Podrá Defendernos?



El año 2010 le ha traído a Las Terrenas pesados desafíos territoriales.

La lucha por el futuro de Las Terrenas es la lucha por sus recursos naturales, los que son grandes atractivos para inversionistas de todas las calañas, incluyendo depredadores como también personas sensatas y balanceadas. Tales recursos en su mayor parte están fuera del alcance de la población local y forman parte del mercado abierto de compra y de venta de bienes.

Bondadosamente, los recursos naturales que tiene Las Terrenas no aparecen en ninguna otra parte del pais ni del Caribe. Barahona-Pedernales es el gigante durmiente, pero esa región tiene una diversidad diferente de recursos naturales. Las Terrenas tiene una distribución flexible de recursos y circunstancias: comunidades habitables, grandes espacios verdes, montañas, lagunas, manantiales, excelentes playas (aunque en proceso constantes de deterioro y de erosión), cercanía a las ballenas, Parque Nacional Los Haitises y a playas vírgenes, entre muchas otras cosas. Aunque en menos de dos años la autopista estará terminada no nos ovidemos que transitar en ella costará unos 1000 pesos ida y vuelta, sin contar los aumentos y ajustes por inflación, lo que implicará un movimiento interno de características particulares.

Los desafíos territoriales son: la virtual pérdida del acceso público en Cosson, en Playa Bonita y, eventualmente, en Playa Las Ballenas; la privatización de la zona playera alrededor a Balcones del Atlántico y, eventualmente, toda esa zona hasta La Barbacoa; el acceso a través del camino comunero de Maricó y la potencial privatización del entorno de Punta Popy.

Todas esas cosas han venido emergiendo a través de los últimos cinco años y no ha sido hasta ahora que el síndico municipal, con o sin auxilio de la sala capitular, ha alzado su voz. Es un poco tarde y el ayuntamiento carece de estrategia legal, social, económica y política para hacerle frente a las situaciones detrás de las cuales se enconden poderosos intereses.

Lo que necesitamos ahora es una sólida estrategia municipal de protección a nuestros recursos naturales.

Lo que necesitamos ahora es una sólida estrategia municipal de protección a nuestros recursos naturales, las playas siendo parte de éstos, pero para ello se necesita una manera diferente de hacer las cosas, una manera tan diferente de hacer las cosas que realmente ni el tosudo síndico ni sus tosudos allegados saben cómo hacerlo.

Las circunstancias requieren una respuesta multidisciplinaria—legal, política, económica—pero más que nada requieren de una estrategia de desarrollo municipal sostenible, algo que escapa al entendimiento y a la capacidad de los incumbentes municipales. Como el destino del municipio lo debe regir la sala capitular, según lo explica la ley de municipios, entonces la mejor esperanza para el futuro de los recursos naturales del municipio es que los regidores se informen bien, que alcancen un nivel de entendimiento profundo, que se enriquezcan con las ideas y recursos de personas autorizadas y que desarrollen una estrategia de desarrollo municipal a nivel del Siglo XXI y de nuestras circunstancias.

No creo que puedan hacerlo siendo manejados por el ejecutivo incumbente pero me gustaría creer que son capaces de actuar independientemente por el bien del municipio o que tendrían el deseo de hacerlo. ¿Qué piensan ustedes?

lunes, 23 de noviembre de 2009

La Penumbra del Presente

¿Cuánto más cerca podremos estar del precipicio?

Algunas personas me han preguntado que si aspiro a ser síndico. Siempre he respondido que no. Aunque creo que el servicio político honra y enaltece, hasta ahora no me he sentido llamado a realizarlo porque, más que todo, estoy ocupado en otro tipo de servicio comunitario. Además, en el sistema político dominicano para poder llegar a una posición de ese tipo es necesario ser miembro de un partido determinado y/o ser candidato reconocido de un partido. Como yo pienso que todos los partidos tradicionales en el momento presente le han faltado al pais por sus altos niveles de corrupción y de salinidad no me siento capaz de funcionar adecuada y efectivamente como parte de uno de ellos.

En tiempos recientes me he sentido profundamente compungido con el escenario político local (“toda política es local”, decía el fallecido vocero de la cámara baja del congreso norteamericano, Tip O’Neill). Por uno de esos idealismos irreconciliables con la obvia realidad, pensaba que los dos partidos mayoritarios, el Partido de la Liberación Dominicana que gobierna al pais, y el Partido Revolucionario Dominicano, ambos fundados por el insigne maestro Juan Bosch, de alguna manera u otra podrían recapturar el idealismo y los principios de su fundador y darían un salto milagroso hacia una plataforma nueva, honesta, transparente, ética y puntual, dentro del marco de las terribles condiciones sociales que afectan al municipio. Fue todo un idealismo, un sueño, un terrible espejismo.

A veces me pregunto, ¿qué pasa por la imaginación de nuestros líderes políticos cuando resulta obvio que gran parte de la población conoce de sus fechorías y de sus traspieses? ¿Cómo es que puede continuar haciendo lo que hacen como si no pasara nada? Claro está, nadie puede realmente culpar a nuestros políticos locales cuando hay políticos mundiales de la estatura de George W. Bush (USA), Silvio Berlusconi (Italia) y Toni Blair (Reino Unido) que han sido verdaderos payasos del haber político y social (reconozco que esa es mi opinión muy personal).

En el caso de las realidades políticas terreneras, algunos podrían argumentar que la comunidad poco a poco va madurando en su capacidad de elegir a sus líderes ya que, después de todo, éste sigue siendo un municipio relativamente joven. Muchas veces las esperanzas se colocan sobre personas consideradas como “capaces” aunque, recientemente, alguien comentó que tomando a Las Terrenas, El Limón, Santa Bárbara y Las Galeras como ejemplos el municipio que mejor ha hecho en sentido general (Las Galeras) es el único dirigido por una persona de limitada preparación académica pero que ha logrado desplegar honestidad, efectividad y amplia visión en la manera en que escogió estrategias y fomentó decisiones francamente ambiciosas y productivas.
De todos los síndicos que ha tenido Las Terrenas el actual parece ser el de mayor nivel académico, conquistando su licenciatura mientras está en funciones, siendo igualmente el más joven entre los que han dirigido al municipio. Es también la persona que despliega una ambición política algo desmedida. En el conjunto de esos factores el síndico actual ha desplegado igualmente las mayores incapacidades dentro del marco de un municipio de tanta riqueza y de tanto potencial, mientras que para sorpresa de muchos un buen número de munícipes sigue pensando que es el que más ha hecho aunque es el que más obviamente ha hecho caso omiso a leyes y a posibilidades, manejando la gerencia de manera autocrática y dictatorial. Cabe recordar el decir de que los pueblos se merecen los líderes que tienen, lo que me hace pensar acerca de qué es lo que tiene Las Terrenas para merecerse un líder tal. Las especulaciones abundan! (Derecha: el señor síndico de Las Terrenas; a veces me lo imagino sentado debajo de una mata de mango, riéndose de este pueblo!)

Si la preparación académica no es garantía de nada es probable que experiencia en ser “vivos” sea un requisito esencial, porque la política moderna frecuentemente se ha identificado con el neoliberalismo, fundado por Keohane y Nye, la filosofía igualmente atada a la economía en que el enfoque se centra en las “ganancias absolutas” y no en las “ganancias relativas.” De esa manera si alguien añade a la posibilidad de ganar el municipio (incluyendo haciendo alianza con personas que podrían ser altamente cuestionables pero que manejan fuerzas directas o indirectas) entonces ese es el candidato al que hay que darle apoyo.
El mejor ejemplo de ello lo constituye el actual síndico quien ha aportado muy poco al desarrollo integral del municipio y al que algunos de nosotros hemos acusado de severas faltas, pero quien ha logrado crear la impresión de poder otorgar la “ganancia absoluta” de reconquistar el municipio, sobretodo en el contexto de los otros dos candidatos, Guillermo y Willy, ante sus potenciales oponentes. Esto quiere decir que para el partido es mejor preservar el poder (ganancia absoluta) aunque eso signifique utilizar a una persona pobremente cualificada para hacerlo como debiera ser.

Otro ejemplo lo es el actual senador y candidato a la reelección a la senaduría, el Dr. Prim Pujals, una persona que ni siquiera es miembro del partido de gobierno, pero forma parte de la maquinaria del Dr. Carlos Morales Troncoso, reformista aliado al Presidente Fernández y canciller de la república. La candidatura a senador es un regalo del Presidente Fernández a Morales Troncoso por su lealtad aunque el senador Pujals es, posiblemente, uno de los senadores más ineptos en el pais. Me pregunto muchas veces cómo es que una persona considerada por algunos como “inestable” pueda ser aceptada por el partido para la posición más alta en la provincia. No tiene sentido desde el punto de vista de “ganancia relativa”, pero sí desde el punto de vista de “ganancia absoluta.” O sea, ayuda a mantener a un aliado político nacional dentro del redil aunque eso signifique sacrificar a una provincia pequeña a nefastos resultados. (Foto izquierda: El Dr. Prim Pujals es acusado de ser loco pero la realidad es que de tonto no tiene nada!).
Yo creo que Las Terrenas debe abandonar el modelo neoliberal y que sus fuerzas políticas debieran reunirse en una cumbre para procurar un Pacto Por El Futuro, creando conciencia y fomentando los procesos necesarios que en los próximos séis años puedan colocar a Las Terrenas en un sitial envidiable y, sobretodo, para hacer frente a las tareas indispensables del desarrollo sostenible e integral del municipio. Para llegar ahí habría que abandonar los intereses individuales y partidarios en pos del mayor bienestar comunitario posible porque, como decimos en Terracción, “Las Terrenas merece lo mejor.” Por ejemplo, la pobreza y la marginalidad cunde por los cuatro puntos cardinales del municipio y, lamentablemente, no se escucha a nadie hablando de la necesidad de hacerle frente. La pobreza no es argumento de los políticos tradicionales, excepto para mantener a los más pobres bajo la dependencia del clientelismo político.

Caramba, quizás debiera considerar seria y humildemente candidatearme como síndico.

martes, 23 de junio de 2009

Once Meses

Dentro de once meses (Mayo 16, 2010) el país elegirá a nuevos síndicos, regidores, diputados y senadores. Si el acuerdo entre el Presidente Fernández y el pre-candidato a presidente por el PRD, Ing. Miguel Vargas, se realiza cual lo acordado esas personas permanecerán en el poder por seis años.

Seis años es un tiempo bastante largo y un período donde se manejarían sumas millonarias de las arcas estatales y locales. En el caso de Las Terrenas se estima que la administración edilicia manejaría unos 600 millones de pesos, además de lo que pueda entrar al ayuntamiento por medio de arbitrios y otros medidas impositivas. Un senador de la república maneja actualmente unos 18 millones de pesos al año, lo que en seis años representaría unos 108 millones, además de muchos otros beneficios que no pueden ser contabilizados ni predecidos.

Los/las ciudadanos/as en potestad de votar no pueden tomar esta situación a la ligera. Cabe preguntarnos cuáles son las cualidades esenciales que deberíamos esperar de nuestros líderes sabiendo que nuestra calidad de vida, nuestra seguridad ciudadana, los servicios municipales básicos, la toma de decisiones en cuanto a leyes y ordenanzas, todo ello dependerá de la calidad de las personas a ser elegidas. Faltan apenas 11 meses para esas elecciones, es mejor que empecemos a pensar es las implicaciones desde ahora.

Liderazgo Honesto
Para el 2008 la organización Transparencia Internacional publicó su encuesta sobre percepción de la corrupción situando a la República en la posición 102 entre 180 países. O sea, hay 101 países menos corruptos que el nuestro (Dinamarca es el menos corrupto mientras que los USA ocupa la posición 18, Francia la posición 23 e Italia la posición 55). Cincuenta años después de la gesta histórico-patriótica del 14 de Junio en contra del tirano Trujillo nos encontramos en un país en el que impera la corrupción desde arriba hacia abajo, en el que las promesas de servicio público quedan incumplidas, en el que la opresión del favoritismo y clientelismo político y el manejo ilícito del erario crea una nueva tiranía, la tiranía de la corrupción. Por eso es que la primera condición que deberíamos buscar en nuestros candidatos es la honestidad y la mejor forma de probar si un candidato es honesto es lo que sus acciones hayan ejemplificado. Si un candidato ha sido honesto y transparente muy probablemente lo será otra vez. Si Ud. no sabe cómo un síndico, regidor, diputado o senador ha manejado sus finanzas o si hay evidencia de corrupción e intransparencia entonces no lo elija otra vez. Tan simple como eso.

Liderazgo Participativo
El líder moderno no puede ser autócrata, su mandato viene del pueblo no de sí mismo. El liderazgo participativo se encargo de que todos tengan acceso a la información, que opinen, que participen en la toma de decisiones y que manejen fondos y recursos puestos a su disposición. Es también un motivador, haciendo que los demás se sientan parte de la toma de sus decisiones, beneficiándose de lo bueno que ocurra y compartiendo responsabilidad cuando las cosas no salen como se desean. El líder que piensa que el gobernar requiere un accionar narcisista y auto-enaltecedor se ha equivocado de siglo. El líder que oculta información de su gente es un controlador que apenas es elegido se siente que sabe más que todos los demás, aunque no haya tenido experiencia prveia. Hoy en día la gente demanda que sus opiniones seas escuchadas, que se responda a sus necesidades más perentorias y a que la dirección de la cosa pública sea un reflejo de las mejores virtudes posibles, las que enaltecieron personas como los creadores de la Nación, el restaurador Gregorio Luperón y el Presidente Juan Bosch.

Liderazgo Efectivo
En caso del municipio el síndico es cabeza de la administración pública y gerente de sus servicios, sus fondos y sus programas. Además, el síndico es cabeza del organismo supervisor de seguridad pública ante desastres, es igualmente cabeza de la Unidad de Gestión Ambiental Municipal (UGAM) para el cuidado del medio ambiente y juega un papel preponderante en la promoción del desarrollo económico en su comunidad, proveyendo fondos, atrayendo fondos y facilitando la ejecución de proyectos y programas que enriquecen a la gente, económica, cultural y socialmente. Hay cientos de programas y fondos disponibles, tanto de parte del gobierno como de organizaciones extranjeras, que podrían ser obtenidos para el desarrollo local. Por ello es que el liderazgo más efectivo se realiza en la manera en que el líder se convierte en mayordomo de los bienes a su alcance, atendiendo igualmente a las necesidades de los más débiles, los niños y los ancianos, mientras vigila que los servicios esenciales (tránsito, manejo de desechos sólidos, bomberos, biblioteca, cultura, seguridad, espacios públicos, etc.) tengan lo que necesitan para su funcionamiento adecuado.

Liderazgo Visionario
Los líderes que elegimos deben consensar ideas y recursos para que la comunidad tenga claridad de dirección, para que se concreticen objetivos de desarrollo que sean sostenibles y realizables. Sin claridad de meta no pueden alcanzarse objetivos determinados, no se pesca en aguas revueltas a menos que lo que se busque es “pescar lo que sea.” Imagínense lo que sería una comunidad si sus autoridades locales actuaran en acorde con los diputados y senadores, con los oficiales y encargados de oficinas gubernamentales y todo se hiciera en base a esa visión consensuada de un destino común: la mejor calidad de vida posible para todos los ciudadanos.

Por eso es que once meses antes de las elecciones venideras debemos comenzar a pensar sobre nuestro futuro y sobre el liderazgo que nos merecemos. Las Terrenas se merece lo mejor que podamos darle.

Sísifo y el Fénix

  LA DESGRACIA DE SÍSIFO Y LA PROMESA DEL FÉNIX (Escrito en el 2009) Todo el mundo tiene una idea de lo que se debe hacer en Las Terrenas. T...