domingo, 15 de julio de 2012

El Sendero Oculto


El joven Ramón Antonio me confiesa que está cansado, hastiado, desencantado de la vida.  Para una persona de apenas 22 años es mucho para decir, habiendo sucumbido ante la desesperanza y la obsesión por el bien vivir, inalcanzable para él. Su compañera se le fue, me dijo que ella le dijo hace dos noches que aunque es buen muchacho y de buen corazón “no sirve pa’na”, no consigue trabajo, no puede hacer nada, no tiene cuartos y no puede ofrecerle nada.

Ramón Antonio me confiesa que su compañera es muy bonita, “muy sersy”, con ojos claros que alumbran un rostro de nariz aguileña, labios llenos y mejillas levantadas.  Cuando vi su foto comprendí lo que decía, Luisa se veía de lado, sonrisa a flor de piel, juguetona en sus ojos y con esa aura de entrega que puede volver loco a cualquier amante que se le acerque a dos pulgadas de distancia. 

Harta de pasar hambre salió unas noches antes a uno de los bares donde van turistas, “pa’verlo que aparece” y se le apareció un tipo que la engalanó, la sedujo y le ofreció lo que Ramón no podía darle:  una buena cena, una cama cómoda y sexo impredecible, sorprendente, cautivante y prohibido.  Y dos mil pesos en la cartera.  Descubrir tantas cosas en una sola noche era más de lo que podía soportar su pobre corazón de 17 años y desde ese momento descubrió que tenía vocación para sentir placer, dar placer y ganarse la vida haciéndolo.  A partir de ahí no había camino de regreso, el sendero oculto de la vida se le hizo claro, pernicioso y ganancioso. 

La  vida es amplia, compleja y, hasta cierto punto, infinita.  Sus secretos se convierten en descubrimientos estrafalarios, sus guaridas son impredecibles, sus cuevas y escondrijos pueden ser indescriptibles y hasta nefastos.  Como en muchas otras instancias de la vida, a veces es mejor vivir en ignorancia que delatar los secretos que pueden hacernos felices. Luisa y Ramón Antonio descubrieron vidas diferentes, una llena de desesperanza y la otra, llena de placeres y sorpresas.

Vivimos vicariamente las experiencias de trabajadores sexuales que vemos a nuestro alrededor.  Nos preguntamos cómo es porque ya entendemos el por qué.  Yo admiro profundamente a los y las personas que se buscan la vida ofreciendo placer a cambio de dinero.  No me atrevo a levantar un solo dedo de condena ni de acusación, porque con qué virtudes propias puedo criticar la realidad más evidente de todas:  hay que vivir y hay que ayudar a vivir a los que amamos.  Si tu arte es ser plomero, vive de tu plomería; si es ser carpintero, vive de tu carpintería; pero si es tu arte es seducir y conquistar, ofertando placeres de otra forma inalcanzables para algunos, regalando fantasías, sueños bacanales y mentiras piadosas, entonces vive de tu arte.

Yo sé, muy dentro de mi, que si estuviera en iguales circunstancias probablemente estaría haciendo lo mismo para vivir, para que mis hijos vivan, para mantener a mi madre, para ayudar a mi familia.  O, simplemente, porque me da placer, independencia y control.  No señores, se merecen respeto, aunque en el fondo sintamos la inevitable sospecha de lo prohibido, del sendero oculto que avistamos como autodestructible.

Me gustaría encontrarme con Luisa, dejarme seducir por sus ojos claros, por su sonrisa coqueta, por sus besos plenos de placer. Quisiera me abrazara en sus cabellos, me apretara con sus manos y me hiciera disfrutar lo prohibido.   ¿No es eso lo que buscan todos?  Siento pena por Ramón Antonio, por ese pobre diablo que no puede hacer nada para cambiar su destino.  Es muy tarde para él cuando apenas amanece para Luisa.

Así es la vida, nos trae sorpresas en cada esquina. Si ven a Luisa por ahí, por favor díganle que quiero conocerla, que si desea platicar con un viejo calvo, rechoncho y aburrido que yo soy un buen candidato, que deseo me ayude a descubrir el sendero oculto que sólo ella me podrá develar.

El Refugio de la Mentira


Mentimos constantemente.  Lo hacemos por no saber la verdad, o por temor a las consecuencias de decir la verdad, o porque mentir es más fácil. Por encima de todo, mentimos por la más democrática de las razones:  somos humanos y los humanos mienten, queriendo y sin querer queriendo. 
La mayoría de los estudios sico-sociales revelan que detrás del deseo de engañar o de mentir se encuentra una estima propia baja.  Mentir es un mecanismo de defensa en contra del ambiente de mentiras y desengaños que nos rodea.  O sea, mentimos para defendernos de las mentiras de los demás (y de las nuestras).
A pesar de las apariencias, mentir es complicado.   Si yo digo “soy mentiroso”, ¿cuál es la verdad, que soy de verdad mentiroso o que miento al decir que soy mentiroso?  Ay, esto dá dolor de cabeza. Todos conocemos el dilema del vaso a medio llenar, el que algunos ven medio lleno y otros medio vacío.  Pero si alguien te dice una media mentira, ¿es la otra mitad toda verdad?  O si alguien te dice una media verdad, ¿es la otra mitad toda mentira?  Cualquiera sea tu respuesta una cosa es cierta, nada sustituye tan bien a la verdad como una mentira.  Lo que sé es cierto es que mentir tiene consecuencias muy penosas y autodestructivas.  Un proverbio judío reza “con una mentira suele irse muy lejos, pero sin esperanzas de volver.”  Es innegable que a los humanos nos escanta irnos de paseo muy lejos. 
En Dominicana somos maestros en el arte de la complicidad con la mentira.  Por ejemplo, sé de muchos que no saben nada de plomería, ni de electricidad, ni de albañilería, ni de pintura, pero si alguien les pregunta si pueden hacer uno de esos trabajos en seguida responden “claro que sí”.  Si alguien les pregunta si son dueños de la tierra en venta dicen que sí aunque no lo sean.  Parecería que no nos gusta ni quedar mal ni que el otro se sienta mal, por eso le decimos al otro lo que quiere escuchar y nosotros sentimos gran satisfacción mintiendo porque esa mentira hace que el otro se sienta mejor (y nosotros también nos sentimos mejor).
Nuestras mentiras más notorias posiblemente tienen que ver con la política. El próximo 16 de agosto el recién electo presidente Lic. Danilo Medina subirá su mano derecha para juramentarse como tal bajo la premisa de que los dominicanos ejercimos el voto libre y soberano y lo elegimos democráticamente.  Embuste, todo el mundo sabe cómo fue elegido, pero convertimos ese gran teatro en una mentira colectiva que satisface nuestra necesidad de vivir bajo la falsedad.  Pagar a otros, comprar cédulas, utilizar fondos públicos para hacer campaña y hacer todas las marañas posibles para ganar es parte del gran teatro de la mentira donde encontramos refugio y amparo, donde nos complace decirnos a nosotros mismos “lo logramos, engañamos pero lo logramos.”  Quisiera poder decir que eso sólo ocurrió en estas elecciones y con este candidato, pero no, es sistémico, en todos los partidos y en todas las elecciones, locales y nacionales.
El inglés Lord Chesterfield aseguró que “decir mentiras constituye el único arte de la capacidad mediocre y el único refugio de los hombres viles.”  El mentiroso vil se “infla”, se enamora de sus propias mentiras y tiende a ser un neurótico narcisista cuya misión es convencerse a sí mismo de que su mentira siempre es verdad.  En la sicoterapia se identifica el “patrón narcisista” como aquel que manifiesta “sentimientos de importancia y grandiosidad, fantasías de éxito, necesidad exhibicionista de atención y admiración, explotación interpersonal.”  El narcisista crónico se masturba mentalmente con sus propias mentiras, se refugia en el eterno vaivén de verdades a medias, convirtiéndolas en gigantes irrefutables dentro de su mente, como los molinos de don Quijote.
“La verdad siempre triunfa por sí sola, la mentira necesita siempre complicidad”, dijo Epicteto.  Entonces es posible que aquí vivamos en un pais de cómplices compulsivos, compartiendo nuestras mentiras con nuestros compañeros de vida, celebrando y disfrutando las mentiras de políticos, artistas y compañeros de trabajo.  Aunque vivamos en base a mentiras, en el fondo sabemos qué es verdad, a menos que seamos bipolares y confundamos una cosa con la otra hasta tal punto que a veces no sabemos si estamos viviendo en el refugio de nuestras mentiras o en el teatro de nuestras verdades. 
Hay algo terriblemente hermoso y humano en nuestro mentir.  El refugio de la mentira es encantador, su ulular nos atrae como sirena voraz, su abrazo es una cadena en nuestros cuellos.  Por eso mentimos cuando amamos, para liberarnos de la pasión que nos esclaviza.  Por eso mentimos cinco, diez, quince, veinte veces al día, porque vivir constantemente en la verdad nos destruiría.

lunes, 2 de julio de 2012

El Embrujo de la Violencia



Hace unos días un niño vino cerca de la Biblioteca Anacaona con un tirapiedras. Sin razón alguna le tiró una piedra al letrero de la biblioteca, haciendo un hoyo y destruyendo el centro del mismo. Le pregunté a algunos vecinos si habían visto lo ocurrido y me dijeron que sí, pero que no pudieron hacer nada. Obviamente se trata de un chico algo violento, quizás con alguna afección emocional o, quizás alguien acostumbrado a ver o a experimentar actos de violencia y por ello lo ve como algo normal.


Casi a diario veo casos similares: los niños que atacan aves y animalitos sin razón alguna, hermanitos dándose golpes, padres o madres amenazando verbalmente a sus pequeños por cualquier cosa, llamándolos ofensivamente y hasta golpeándolos. En la calle veo a motoristas que transitan de manera impulsiva y violenta, se cruzan delante de uno, se atraviesan, hacen gestos groseros, protestan, amenazan, gritan. Los políticos nos engañan, nos roban, nos avasallan, abusan de sus privilegios y toman medidas violentas en contra del bien común. Todo es violencia..

En lo que va de año cerca de 100 mujeres han sido muertas por compañeros, amantes, esposas. Niños matan a niños. Dos amiguitos juegan juntos y minutos después uno le pega un botellazo al otro y lo mata, por un pleito de carritos. Otro hombre se corta el pene despechado porque la persona que ama lo rechaza. La policía mata con o sin razones, los vecinos se lanzan pedradas o disparos, otros echan basura en la propiedad ajena y otros tantos rayan carros o dañan lo que no es suyo. Igualmente maltratamos a los animales, quemamos los árboles, por comer un mango maduro tumbamos a 20 de los verdes y nada parece importarnos. El mar se ensucia, los humedales se cegan, los lomas de queman, los árboles de cortan, los ríos se contaminan. Todo es violencia. En la radio hablan mal, insultan, ofenden, mienten. Todo es violencia.

Parece que vivimos totalmente infatuados con la violencia, una violencia que nos abraza, nos besa, nos hace el amor, se acuesta con nosotros, se viste de nosotros, nos perfuma, nos maquilla, nos peina y, finalmente, nos da color, sabor, textura, forma y movimiento. Vivimos embrujados por esta violencia.

¿Qué hacer? Decía Gandhi que todo lo que se obtiene con violencia “sólo se puede mantener con violencia” y es por ello que a veces los resultados de la violencia son hasta peores que la violencia misma al reducirnos a la impotencia, al desespero, a la frustración y al desencanto. Cuando alguien actúa con violencia física o emocional contra nosotros puede que sintamos que no hay nada que podamos hacer. El engaño, el robo, los insultos, las injurias, las mentiras, los abusos, los golpes y la muerte son todas formas diversas de violencia en contra de las cuales a veces no sabemos qué hacer. Si usted se siente agobiado o agobiada por la violencia recibida no se sienta mal, a todos nos pasa lo mismo.

Admiro mucho el pensamiento de Francisco, un italiano del pueble de Assisi en la zona de Perugia en el centro de Italia entre Roma y Florencia. Nació en una familia rica en el siglo XII y disfrutaba ampliamente de la vida, hasta que recibió una visión diferente de la vida y volvió a su casa para convertirse en un pordiosero. Fundó la orden de los Franciscanos y de las monjas claretianas que hacen votos de pobreza. Se le considera como el santo patrón de los animales y del medio ambiente. En una de sus meditaciones escribió una oración profundamente inspiradora que quizás pueda ayudarnos a responder la pregunta “qué hacer” ante tantas formas de violencia. Dice Giovanni Francesco:

Oh, Señor, hazme un instrumento de Tu Paz
Donde hay odio, que lleve yo el Amor.
Donde haya ofensa, que lleve yo el Perdón.
Donde haya discordia, que lleve yo la Unión.
Donde haya duda, que lleve yo la Fe.
Donde haya error, que lleve yo la Verdad.
Donde haya desesperación, que lleve yo la Alegría.
Donde haya tinieblas, que lleve yo la Luz.

Oh, Maestro, haced que yo no busque tanto ser consolado, sino consolar;
ser comprendido, sino comprender;
ser amado, como amar.

Porque es:
Dando , que se recibe;
Perdonando, que se es perdonado;
Muriendo, que se resucita a la
Vida Eterna.

Entonces la respuesta es quizás que nos convirtamos en agentes de cambio y provoquemos una alteración en el curso "normal" de las cosas violentas. Como dijo Gandhi “sé tú el cambio que deseas ver en el mundo.”

miércoles, 20 de junio de 2012

La Aldea--A Blatant and Unnecessary Provocation


The reconstruction of the Aldea de los Pescadores is a provocation.
Let me explain.

Like most people who frequented the Aldea de los Pescadores, I rather enjoyed and appreciated its existence and its many contributions to the social and cultural life in the community. At the same time I was painfully aware of its noticeable security problems, the environmental pollution caused by kitchens and toilets, and of the obvious consecuences of a highly attractive but monolithic tourism offer. I was not, nor am I now opposed to the fabulous culinary offerings and the enchanting nature of diverse environments that such a concept can offer. I'm neither opposed to sustainable economic development or to meritorious benefits to workers, investors and entrepreneurs.

The list of assets and benefits of the former Aldea, what's about to happen is truly a crude provocation created by those least in the position of being provocateurs: the central government and the local government. As far as I know, the Ministry of Tourism lacks the presidential decree necessary for the building of structures such as the one that appears to be under construction at the former site (though the Minister of Tourism is eagerly pursuing it). The local government has not intervened, so far, to prevent the obviously illegal reconstruction at a place where it shouldn't be.


As expected, the level of misinformation and the lack of transparency creates confusion and blindness in everyone. What's being done, who is doing it, how, for how much, directed by whom? We don't know. As rumored, are they going to give each of the previous owners 10 million pesos? We don't know. Are the previous owners receiving the new locations for free? We don't know. What are the legal, social and economic basis for doing one thing or the other? We don't know. In the presence of clearly stated, legal statutes governing the building of such structures so close to the water and in the midst of fragile ecosystems, why do it at all and why do it this way? Is it true that powerful people, well-connected to the government, are among the beneficiaries? We do not know....and so forth!


At the end the Minister of Tourism will get away with murder on this one and, according to rumors, will finish the work before August 16. In doing so, he would have fulfilled a promise made the afternoon of the fire and will consequently embellish our memories with yet another demonstration of how to make fun of Dominican laws and the Dominican Constitution, all in the good name of tourism development, as demonstrated by his opportunistic leadership style worthy of a troglodyte. Once everything is done, we will go to eat, drink, dance and enjoy wonderful new locations and will be reminded of how it was done, by whom and why, and will all share in the knowledge of the failed state in which we live, where those most called to enforce the Constitution and the laws are the first ones to use them as toilet paper.

Is it possible that the “Monte Carlo of the Caribbean" will be built on similar foundations, using similar methods, without regards to the laws, environmental regulations, without the proper decrees and always looking after the benefits of the few over the benefits of the majority?

(Left: From these ruins we should build what's legal, sustainable, viable, equitable, transparent and in compliance not only to the Constitution and laws but also to the best practices in sustainable tourism development. It is counterproductive for the Minister of Tourism to be the principal culprit in the violation of Dominican laws, provoking with his actions the worst possible inconsistencies in regards to principles of sustainable tourism development)


I, among many others who love the concept of the Aldea, feel that it doesn't have to be built at its former site. We can built something similar and even better, but elsewhere. In a previous article I suggested the area further ahead towards Playa Las Ballenas as a possible location and, in a recent contribution, architect Marcelo Albuquerque has suggested the area around the current police station.
I'm sure there could be other viable proposals and the one suggested by architect Albuquerque may even add the entire section from the cemetery to the former Aldea de los Pescadores, and could even include the construction of a pedestrian bridge over Rio Las Terrenas, the design of an attractive cultural center that includes boutiques, artisan shops, art galleries, as well as plenty of gastronomic offers. Not everything has to be in the same place the way it was in the former Aldea and nothing prescribes that things have to be as they were, particularly if something better and more beneficial is possible.

On the other hand, the town of Las Terrenas as a legal, civic, political and autonomous entity should intervene through its City Council (I do not think that the Mayor has the least interest in going against the wishes of the Minister of Tourism). If the City Council does nothing, then no one could prevent the Ministry of Tourism and other entities, governmental or private, to commit similar violations of the law and the Constitution. What is happening now is more of the ongoing demonstration of how the city has lost its autonomy and sovereignty in the years since Mr. José Alexis Martinez has been Mayor. Inaction on the part of the City Council will provoke additional dents to city processes and procedures.

I'm fully in support of a reconstruction of the Fishermen's Village but better, which means that no environmental laws would be violated, that we would broaden and enrich the economic potential of the resulting model and that the sovereignty of the city would be respected.
We cannot build a future on the quicksand of intransparency, the abuse of power and the absence of institutionality. In fact, many social problems and much of the economic problems we face today are the result of having acted that way years ago. Why provoke similar results now?

What to do now? Stop the construction! At a town hall meeting in City Hall inform what the plans are. Consult with broad sections of the community, making sure you make it possible for diverse views to be heard. Ensure that the intentions and the actions comply with current laws and the Constitution. Acting unfairly to the economic community at large will create disastrous results because whatever it's done cannot be just for the benefit of the lucky few. Hopefully, the potential beneficiaries themselves can see and understand these factors and will push for legal actions that favor the common good. If not, they'd be contributing to the planting of a pernicious, harmful, painful and fruitless weed, to the detriment of all of us.

Consciousness, gentlemen, conciencia!

martes, 19 de junio de 2012

Sembrando Cizaña


La reconstrucción del Pueblo de los Pescadores es una provocación.
Me explico.

Al igual que la mayoría de las personas que frecuentaban la Aldea de los Pescadores yo disfrutaba del lugar y apreciaba su presencia y su aporte a la vida socio-cultural de nuestro pueblo.   Al mismo tiempo vivía consciente de sus profundos problemas de seguridad, de contaminación medioambiental y hasta de la ceguera que causaba al fomentar una prominente mono-oferta turística. No estaba ni estoy opuesto a las fabulosas ofertas culinarias y a la diversidad y modalidad de sus ambientes, tampoco al desarrollo económico o al beneficio meritorio de trabajadores, inversionistas y empresarios turísticos.

A pesar de todo lo anterior y de lo que se le pueda añadir la provocación es causada por los menos llamados a crearla: el gobierno central y el gobierno local. Que yo sepa el Ministerio de Turismo carece del decreto presidencial que de acuerdo a lo que se conoce es lo único que puede permitir construcción de estructuras como la que aparentemente se erige en ese lugar.


Como hay mucha desinformación e intransparencia parece que no se conoce a ciencia cierta lo que está pasando, lo que va a pasar, cómo, para quién y por qué. ¿Se le van a dar 10 millones a cada uno de los antiguos propietarios? No sabemos. ¿Se le van a regalar los locales? No sabemos. ¿Cuál es el fundamento jurídico, social, económico para una cosa o la otra? No sabemos. Además, si existen leyes y procedimientos claramente establecidos en relación a construcciones en zonas frágiles como esa, ¿por qué hacerlo? ¿Será verdad que hay personas poderosamente asociadas al gobierno entre los beneficiarios? No sabemos.
Como es muy probable que el Ministro de Turismo se salga con la suya y, según los rumores, concluya la obra antes del 16 de agosto, lo que se verá ahi será el cumplimento de su promesa, pero también un ejemplo cabal de cómo un gobierno se puede burlar de sus mismas leyes y de su propia Constitución en nombre de algo muy bueno como el desarrollo turístico y por medio de un estilo de liderazgo troglodita y oportunista. Cuando acudamos a comer, beber, bailar y disfrutar del nuevo ambiente seremos recordados de cómo se hizo, quién lo hizo y por qué se hizo, un nuevo monumento al pais de relajo en el que vivimos, donde los llamados a cumplir las leyes y la Constitución son los primeros en quebrantar ambos. 

¿Será que el “Montecarlo del Caribe” se va a construir sobre los mismos fundamentos, sin apego a la ley, sin protección medioambiental, sin decretos y beneficiando a algunos en detrimento del bien común?

(Derecha:  sobre estas ruinas debe levantarse algo legal, sostenible, viable, equitativo, transparente y en apego no sólo a la Constitución y las leyes sino también a las mejores prácticas de desarrollo turístico sostenible.  Es contraproducente que sea el mismo Ministro de Turismo el principal violador de todas esas prerrogativas deseables y el más enérgico provocador de las peores muestras de incongruencias en el desarrollo turístico)


Yo, entre otros que amamos el concepto de la Aldea de los Pescadores, entiendo que no tiene que construirse ahi, que puede hacerse algo similar y mejor en otro lugar más adecuado. En un artículo anterior sugerí más adelante, hacia la Playa de Las Ballenas y, recientemente, el Arq. Marcelo Alburquerque sugiere el área alrededor del actual destacamento policial.

Francisco Javier García
Ministro de Turismo
De "mecenas" a Provocateur

Es probable que existan otras propuestas viables. Partiendo de la idea del Arq. Alburquerque se podría ampliar la zona desde el parquecito municipal hasta la vieja Aldea de los Pescadores, incluyendo un puentecito turístico y múltiples concepciones culturales, comerciales, turísticas, artesanales, artísticas y gastronómicas. No todo tiene que existir en un solo sitio y nada ni nadie prescribe que lo que hay que hacer tiene que ser igual a lo que existía. Puede ser algo mejor.

Por otro lado, el municipio de Las Terrenas como entidad jurídica, cívica, política y autónoma debe intervenir a través de su Sala Capitular (no creo que el Alcalde tenga ni la voluntad ni el interés de ir en contra del Ministro de Turismo). Si la Sala Capitular no actúa habrá sucumbido ante los mismos estamentos que se atreven a violar la Constitución y las leyes, una muestra más de la pérdida de soberanía que hemos disfrutado bajo el gobierno municipal del Lic. José Alexis Martínez y provocando a través de la inacción una nueva desinstitucionalidad municipal.

Estoy totalmente a favor de una reconstrucción de la Aldea de los Pescadores pero mejor, lo que implica que no se violenten las regulaciones medioambientales, que se amplíe y enriquezca el potencial económico y que se respeten los derechos económicos y patrimoniales del municipio.
No podemos construir un futuro sobre la arena movediza de la intransparencia, del abuso del poder y de la falta de institucionalidad.

De hecho, los problemas sociales y gran parte de los problemas económicos que tenemos hoy son el resultado de haber hecho lo mismo años atrás. ¿Por qué provocar más intransigencias?

¿Qué hacer ahora? Parar los trabajos inmediatamente. Informar al pueblo de los planes y de los pasos en mente. Consultar con amplios sectores las intenciones y procurar que se cumpla lo máximo posible la Constitución y las leyes. Para ser equitativo no podemos privilegiar a algunos en detrimento de otros, porque el resultado será desastroso. Ojalá que los mismos beneficiarios potenciales puedan verlo y comprender que ellos/as debieran ser los primeros en procurar que se actúe con legalidad y con el bien común en mente y en primer lugar. De no ser así están contribuyendo a la siembra de una cizaña perniciosa, dañina, dolorosa e infructuosa.

Conciencia, señores, conciencia!!

sábado, 16 de junio de 2012

Taller Sobre Desarrollo Turístico Sostenible

La Búsqueda de lo Mejor


Este es un municipio bendecido demuchas maneras, algo que reconocen nativos y extranjeros.  Deberíamos vivir en una constante alabanza por todas las cosas que disfrutamos en esta, nuestra esquina del paraíso.  Sin embargo, como lo hemos aprendido todos, las cosas no siempre son como nos gustaría que fueran.  Algunos ejemplos.
Me preocupa la calidad de los nuevos contenedores de basura colocados alrededor de la ciudad.  Algunas de las tapas ya se han roto, algunas de las ruedas ya han perdido suutilidad y no se ha logrado establecer un sistema que mantenga los vertedores cumpliendo su función de manera efectiva.  Al contrario, ahora se han convertido en igual o mayores focos de insalubridad en casi todos los puntos donde han sido colocados.  Esta costosa inversión es muy probable que no dure más de unos meses, parecido a un intento anterior cuando se colocaron casi 100 estructuras metálicas cilíndricas en nuestras calles dizque para ayudar con la recogida de la basura, inversión tal que no rindió ningún bien ni fruto porque nunca se implementó.  Estos contenedores van por el mismo camino, no se cuidan, no se lavan, no se reparan y no se los utiliza como deberíamos, lamentablemente.
El Presidente Leonel Fernández prometió hace meses que 40,000 millones de pesos serían utilizados para asfaltar las calles del pais (una promesa que fue hecha haceaños a los municipios).  Aquí vimos en los últimos tres meses como rápida y aparatosamente se encalicharon calles en barrios y en partes céntricas, pero horas antes a las elecciones se suspendió todo.  Ya va a ser casi un mes y las calles polvorientas y amarillas no se han vuelto a tocar.  ¿Vendrá la brea en camino para entalviar las calles que hoy son fuentes de polvo, contaminación y desespero para los que viven cerca de ellas?
¿Qué ha pasado con el segundo camión de bomberos y con el millón de pesos que se usaría como seguridad para reparaciones y mantenimiento?  De hecho, serían dos camiones más si se toma en cuenta el camión aquél que viajó entre aduanas, Miami y España y hoy no sabemos ni dónde está ni qué se hizo conlos cuartos.

Desde que se abrieron las tuberías del nuevo acueducto Las Terrenas ha vivido bañada en agua. Literalmente.  Cientos de millones de galones se han desperdiciado por causa de tuberías rotas, con agua que brota desde hoyos en las calles y calzadas, corriendo calle abajo hasta el Río Las Terrenas, enlodando solares, calles y hasta casas, destruyendo sigilosamente el fundamento de calles y registros sanitarios.  Se han reparado algunas pocas vertientes de aguas, pero ¿a quién en INAPA le ha dolido el indecente desperdicio de agua que hemos visto en nuestro medio? Después de múltiples llamadas, ya la Ing. Xiomara de INAPA no me responde al teléfono.  Ojalá aprovechen esta terrible seca para reparar las que faltan.

Cuando estaba siendo construído muchos reclamamos abiertamente que el sistema de desague sanitario no estaba siendo instalado adecuadamente y que teníamos en nuestras manos un potencial desastre sanitario.  El problema persiste y nada transcendental o permanente, que yo sepa, se ha hecho al respecto. La bomba de m--rda sigue latente bajo el subsuelo, bajo nuestras calles, aunque ya ha aflorado en varias partes, pero un día de éstos el volcán va a erupcionar y a Dios que reparta suerte.  Es otro ejemplo más de obras de infraestructuras inefectivas, sobrevaloradas pero que contribuyen al espejismo de que mucho se ha hecho.  Ni el acueducto ni el sistema de desague trabajan efectivamente, el dinero fue invertido pero la población no tiene acceso al buen servicio esperado y deseado.
Y como estas cosas hay muchas otras.

Creo que voy a unirme a muchas personas, la mayoría, seguramente, quienen viven totalmente ajenos a estas cosas y a quienes parecen no importarles porque el espejismo del paraíso los ciega, los enmudece, los ensordece y les impide sentir y sufrir.  Muchos no buscan lo mejor porque creen que ya lo tienen.  O, quizás, es todo parte del mágico realismo al que el Caribe (y los partidos políticos en el poder) nos tienen acostumbrados.

Creo que voy a cambiar mis espejuelos y me pondré unos bien oscuros.  Así dejaré de ver lo que veo y, a partir de ese entonces, abandonaré la insípida e infructuosa búsqueda de “lo mejor.”

Carta Abierta Para los Concejales

  Carta abierta a los concejales de Las Terrenas CONCEJALES PARA UN FUTURO MÁS CERTERO Por José Bourget, comunitario Querid@s Concejales: Si...