viernes, 12 de enero de 2007

El Supremo Recurso de la Rebelión

No conozco a ninguna persona que en algún momento en su vida no se haya rebelado contra algo o alguien. La rebelión es muchas veces resultado del enojo, una emoción legítima, adecuada sobretodo cuando hay una buena motivación que la cause.

Hay varias cosas que a mi me causan enojo hasta el punto de rebelión: el americano que vive con una menor de apenas 14 años, utilizando el cuerpo de una niña que aún no es mujer, amparado por un pago irrisorio hecho cada mes a los padres de la niña; el europeo que confiesa ser una de esas personas cuyas inversiones están “ayudando a destruir a esta isla”; el albañil que sin pedir permiso se roba el agua de mi casa para hacer su trabajo en la propiedad frente a mi casa; el adolescente irresponsable, calibrando por la calle Carmen; el basurero interminable al lado del puente en Caño Seco, esperando las lluvias para eventualmente convertirse en adorno sobre la arena de nuestras playas; empleados del hospital sin cobrar durante meses; los camioneros que echan basuras en los montes, cañadas y badenes; el abuso exorbitante del Grupo Piñero, convirtiendo a Portillo, Samaná y Cayo Levantado en basureros privados enterrados bajo lodo y arena, mientras nuestras autoridades no hicieron ni pito para que cambiaran las cosas. Y como esas tantas otras situaciones.

No, no vivo constantemente en enojo porque, afortunadamente, son muchas más las cosas que me causan placer: la risa dulce y apacible de mi hijo menor Kiran, el beso de mi esposa Annette, la creatividad de mi hijo Salim, la nietecita que mi hijo mayor José y su esposa Marlene traerán a la vida la misma semana que nuestra bebé va a nacer, convirtiéndome en padre y abuelo casi al mismo tiempo, la sonrisa satisfecha de la niña de 8 años que hizo una tarjetita llena de colorido durante uno de los talleres en la Biblioteca Anacaona, los niños y niñas jugando fútbol por primera vez en sus vidas, como también esa bendición constante de los atardeceres terreneros, rodeados de ese mar increíblemente bello, de ese cielo adorablemente escénico, de esas colinas interminablemente sublimes, de una gente sorprendentemente alegre y de grandes esperanzas sentidas muy profundamente de que mi pueblo va a mejorar, va a crecer, va a progresar y va a vivir mejor.

La historia humana está llena de enojos individuales y colectivos, muchos de los cuales terminaron en grandes rebeldías y revoluciones. Los Estados Unidos de Norteamérica proclamaron su Declaración de Independencia en el 1776 diciendo “Cuando en el curso de los acontecimientos humanos se hace necesario para un pueblo disolver los vínculos…” y así lucharon para que esos vínculos con una Gran Bretaña prepotente dejaran de existir. En Julio de 1789 el pueblo francés rechazó el autogolpe del Rey Luis XVI y asaltó La Bastilla para proteger a sus representantes, los que reunidos en Asamblea Constituyente proclamaron La Declaración de l os Derechos del Hombre y los Ciudadanos, el 28 de Agosto de 1789, porque consideraron que “la ignorancia, la negligencia o el desprecio de los derechos humanos son las únicas causas de calamidades públicas y de la corrupción de los gobiernos.” Fue esa gran declaración la que creó la frase: “Los hombres han nacido, y continúan siendo, libres e iguales en cuanto a sus derechos..”

El gérmen de la revolución cubana se sembró cuando Batista violentó el proceso electivo que se avecinaba en el 1952 y que seguramente sería ganado por el Partido del Pueblo Cubano. Fidel Castro y otros creyeron que el pueblo cubano merecía mejores condiciones y el 26 de Julio de 1953 (Julio parece ser el mes favorito para las revoluciones), un grupo de hombres dirigidos por Fidel asaltaron al Cuartel Moncada, dando comienzo a una lucha revolucionaria que lidereada igualmente por Che Guevara y Camilo Cienfuegos daría al traste con la dictadura de Batista, creando la revolución más larga y permanente en suelo Americano.

En esta isla, don Tomás Bobadilla redactó en enero de 1844 la “Manifestación de los Pueblos de la Parte Este de la Isla,” en la que se expresabas las causas de la separación de la República Haitiana, hecha como una “indestructible resolución de ser libres e independientes, a costa de nuestras vidas y nuestros intereses, sin que ninguna amenaza sea capaz de retractar nuestra voluntad.” La misma iba a ser leída ante las autoridades haitianas la noche del 27 de Febrero de 1844 cuando se efectuaría la Declaración de Independencia. En el 1965, Caamaño y muchos otros héroes se levantaron en rebelión para reponer al gobierno democráticamente elegido de Juan Bosch, dando paso a uno de los episodios más heroicos en nuestra historia.

Ya sea individual o colectivo el enojo puede ser catártico o transformador. Si usted encuentra razón legítima para enojarse, hágalo. Si encuentra causa para una rebelión, llévela a cabo. En la Declaración Universal de los Derechos Humanos se clama por un régimen de derechos para que el ciudadano no se vea impelido “al supremo recurso de la rebelión.” No hay mejor cosa para un gobierno malo (municipal o nacional) que una ciudadanía apática e incapaz de rebelarse contra la inacción, la ineficiencia o la corrupción. No todos podremos ser un George Washington, un Caamaño, un Fidel, un Ché o un Juan Pablo Duarte. Pero aún así podemos enojarnos y rebelarnos, haciéndolo siempre bajo el amparo del derecho, de la ley y del respeto a los demás.

Me rebelé contra lo que hicieron el Grupo Piñero y sus Bahía Príncipe Hotels and Resorts en la provincia Samaná, así que canalizé mi rebelión a través de una denuncia cuyos procesos no han terminado aún. Si no lo has hecho ya, visita http://terreneros.blogspot.com para que sepas más al respecto. Constructivamente, también he decidido impulsar una agenda verde en la provincia, así que visita http://samanaverde.blogspot.com y UNETE.

miércoles, 3 de enero de 2007

Fantasía

Confieso que no existe nada comparable a besar tu cuello.
No cualquier parte del mismo, sino ese punto ardiente
donde la línea final de tu pelo hace puente con el lunar rojizo en tu espalda.
Hay un puente y un abismo escondidos
entre esos dos puntos,
porque cuando lo tocan mis labios se me esconde la vida,
se me escapa el aliento y me ahogo en el eclipse de tu encuentro.
Cómo puedes tener un lugar así, tan escondido.
Tan deseado.
Tan volátil.
Tan frágil.
Tan poderoso.
Tan sutil.
Tan tuyo.
Me quedo pegado a él como luna al cielo,
como color en la piel, como vástago a su teta.
Explorando los recónditos más intensos de ese punto transversal
en que tantos universos aparecen y se escapan,
porque ese espacio sideral en tu cuello contiene todo el universo
de dulzura, pasión y amarguras.
Me siento hombre y niño mientras lo beso y allí,
en ese lugar escondido que sólo tú
(porque te lo he dicho)
y yo
(porque lo beso despierto y dormido)
lo conocemos, y en él se nace a la muerte y se desvanece la vida.
Quiero nunca tener que dejar de besar tu cuello,
en ese espacio escondido que primero encuentran mis dedos
y luego mis besos.
Después de eso me pierdo yo,
escondido en ese espacio total de mi embriaguez por ti,
revolcado en el perfume vital de un cuello imposible de olvidar
e imposible de fingir.
Primero ese espacio en tu cuello.
Después, nada más.

(Pintura de Mayabanex Vargas)

Las Artes

En su última novela escrita después de un hiato de diez años, Gabriel García Márquez nos introduce al personaje cumpliendo noventa años y deseando celebrarlo haciendo el amor con una virgen. “Memoria de mis putas tristes” sigue el estilo característico del Gabo, adentrándonos en un mundo mágico e inverosímil, pero al mismo tiempo haciéndonos pensar sobre la magia del deseo y la pasión y sobre la fantasía de lo que nos espera en nuestra propia vejez.
El deseo del nonagenario se realiza, pero sólo hasta cierto punto y no de la manera que esperábamos. Lo que vemos es la entrega a una fantasía y a una pasión algo platónica, sujeta a la contemplación y a la imaginación. Aprendemos del paisaje de la habitación, la textura del pelo, el contorno de los dedos largos de los pies y las premoniciones que ofrece la figura desnuda tendida en la cama. También descubrimos en la mente congestionada por las memoria del viejo, cuyo nombre quizás no es ni siquiera mencionado en el texto, lo que hizo con la doméstica Damiana sorprendiéndola por detrás y cómo dejó plantada a Ximena Ortiz el día de la boda. Estos dos eventos son poca cosa comparados con lo que hizo desde la primera vez a los doce años cuando cayó en manos de una prostituta por error y por sorpresa, hasta sus noventa años, pasando por cada una de sus noches en el barrio chino.
Al final de la novela el viejo clama piadosamente por nuestra comprensión, un empeño revelado en cada hoja de la obra, porque no podemos más que sentir pena y confesar empatía con su traspiés. No es asunto de vejez, es asunto de la vida, porque aunque no tengo noventa años me identifico con muchos de sus soliloquios y con muchas más de sus torpezas y creo que junto a mi habrán muchos otros hombres y mujeres también. El amor es torpe, pero el sexo lo puede ser aún más.
Eso es lo bueno de leer novelas tales, uno revive lo que estaba muerto dentro de uno o crea lo que nunca ha podido existir ni en realidad ni en nuestra imaginación. Imagínese cómo sería si sólo viviéramos de la realidad, porque, ¡carajo!, no sé lo que sería mi vida si no pudiera imaginarme dándole un beso a Jennifer López, hacer el amor con Salma Hayek o irme de parranda con Olga Tañón. Aunque confieso que nada se acerca a lo que me imagino que sería compartir todo un día con Penélope Cruz y no sólo estoy hablando de sexo.
En cuanto a imaginación se refiere, a eso es precisamente a lo que nos llevan la literatura, la música, la pintura, la escultura; en otras palabras, las artes. Nos ayudan a crear una ecología de la cultura, o sea, que así como necesitamos agua y aire, sol, tierra y árboles--la ecología del mundo natural--así también necesitamos los beneficios que nos traen las artes, atrayéndonos al ámbito de lo espiritual y nato al tiempo que encontramos balance con lo crudo y lo primitivo. Comer y sembrar puede cualquiera, pero igualmente todos deberíamos aprender a apreciar lo que se puede contemplar y sentir por medio de una pintura, una escultura, un soneto o una sinfonía.
Confieso que el merengue y la bachata son artes también, pero lamentablemente siempre se les liga solamente a lo más primitivo, a lo carnal, a lo animal, a lo crudo y desnudo, como si éstos fueran el todo de la existencia del dominicano. Para mi el regatón es simple basura, desprovisto de cualquier valor humano; al contrario, lo veo deshumanizante y muy alejado de lo artístico, pero eso es totalmente asunto de opinión personal.
En este país donde reina el merengue y la bachata hay tanto arte (no debemos confundir lo presente o ausente en Las Terrenas, que es sólo un pedacito muy pequeño del territorio nacional), comenzando con la sinfónica nacional hasta los atabales de Cotuí; desde los artesanos en San José de Las Matas hasta los cafetales de Polo en Barahona; desde el colorido de los cocolos de San Pedro a la Cofradía de los Congos de Villa Mella; desde los pintores Ada Balcácer, Silvano Lora, Elsa Núñez, Ureña Rib, Guillo Pérez y Cándido Bidó hasta los poetas Fabio Fiallo, José Joaquín Pérez, Salomé Ureña, el poeta nacional Pedro Mir y mi amigo de crianza René Rodríguez Soriano; desde un Johnny Ventura a un Rafael Solano, o desde un Lope Balaguer a una Maridalia Hernández y a un Juan Luis Guerra (y cientos de otros artistas he dejado fuera!).
En Las Terrenas las cosas están cambiando, poquito a poco, porque ya se avista que el 2007 será un año de despegue artístico y artesanal gracias a las iniciativas de muchas personas privadas que ven en Las Terrenas un potencial artístico y cultural que ya no se puede hacer esperar.
Me confieso ser esclavo del arte, de la fantasía, de la imaginación, del ensueño frustrado por no ser ni músico, ni poeta, ni pintor, ni escultor, ni cantante, ni nada, pero me deleito reviviendo dentro de mi la experiencia de cada uno de los artistas que admiro. Y eso me hace cada vez más rico, más lleno, más errante, más bohemio, más humano.
¡Carajo, que vivan las artes!

(Ilustraciones de arriba hacia abajo: Gabriel García Márquez, pinturas de Ureña Rib, Elsa Núñez y foto de Juan Luis Guerra).

sábado, 30 de diciembre de 2006

Nuevo Año, Nuevas Creaciones

El universo ha parido un nuevo tiempo, un elemento artificial de nuestra existencia llamado “año”, un tirano agreste gobernando planes, sueños y decisiones.

A mi me gusta más el año que comienza con el advenimiento de la primavera, nouruz, el equinoccio de primavera, marzo 21, pero en fin y cuenta nos ajustamos como todo el mundo a lo que dispongan otros, dando rienda suelta a lo que todos celebran ahora y posponer la creencia personal para más tarde.

Sea ahora o sea después un nuevo año nos trae oportunidades para re-crearnos, para re-hacernos de muchas maneras. Algunos los llaman “resoluciones,” mientras que yo prefiero llamarlas “recreaciones.” Se me ocurren algunas.

Quiero re-crearme al beso, a ese encuentro espiritual entre dos mundos que se desean, la entrega ilimitada de suspiros internos que no pueden callar y que se ponen a jugar sobre la superficie más posible y más tierna, callando voluntariamente a lo que otros hablarían. Por eso me gusta cómo el austríaco Gustav Klimt lo ha representado en “El Beso” (arriba izquierda), ese gráfico dorado en el que sólo se ven los rostros y manos de dos seres explotando al eroticismo de una entrega sin igual, como la que todos soñamos, o hemos realizado, o ansiamos, o tenemos, o añoramos o que nunca podremos tener (puede pulsar sobre cada gráfico para verlo en tamaño gigante). En un beso se dan tantas cosas y se olvidan otras tantas. Se me ocurre que en el nuevo año debo, igualmente, darme a y olvidarme de, simultáneamente, tantas cosas, como en otro cuadro de Klimt, el fabuloso “Adan y Eva” (izquierda) donde la entrega se refleja tan totalmente en ambos rostros (se dice que fue un autorretrato de Klimt y de su malograda esposa).


Quiero recrearme también al simple pero constante arte de vivir. El nuevo año nos ofrece nuevas oportunidades para celebrar la vida, para sentirnos satisfechos por lo que la vida nos trae y por lo que nos quita, celebrando pura y bacanalmente las ofertas de cada día, como lo representó Henri Matisse en “El baile” (abajo izquierda), repleto de esa dejadez que sólo los que viven en paz pueden percibir, como los cinco bailarines en la obra. Aquí se baila mucho, pero yo me refiero a la danza del alma, a ese momento cumbre cuando todo lo que somos, aquí y en cualquier otro mundo esotérico, se expresa en la sinfonía polifónico de mente, cuerpo, espíritu y esencia.

Quiero igualmente recrearme a mis relaciones. Quizás, Cézanne con su color naranja cálido y motivador, lo expresó mejor en “Las bañistas” (abajo), donde nos acuerda del calor humano que no podemos reprender aunque querramos, el mismo que abunda cuando encontramos razones para extender la mano del compañerismo, de la comprensión y de la solidaridad hacia otros.


Quiero recrearme a la presencia mutua del gozo y del dolor. Por eso, hablando de estas cosas, el que me repica en la mente es Vincent van Gogh con su “Noche Estrellada” (abajo izquierda), ese universo infinito de azul donde el amarillo de Vincent explota como nos debe explotar la vida cada día, con fuerza, con pasión, con puro deseo y con grandes esperanzas, aún cuando sepamos que puede haber mucho dolor por dentro, como ciertamente la experimentó él en aquella noche en que se cortó la oreja, o en la otra en que cegó su vida.. Vincent, Vincent, tanto nos diste y tanto nos enseñaste y, cual lo dice la canción, quizás aún no te comprendemos.


Así que al comienzo de este nuevo calendario, tomados de manos con el universo escojamos las cosas que deseamos recrear, rehacer, realizar, reponer, recoger, remozar, restablecer, renacer en los días que siguen, para que nos volvamos reincidentes en el arte de vivir. Uno de mis alumnos escribió en su examen final la semana pasada “no sé por qué existo.” Ojalá que no nos pase eso, que sepamos para qué estamos aquí y que al saberlo o que al redescubrirlo, le re-entremos de lleno y con ganas a todo lo que el 2007 nos traiga.

Felicidades a todos y a todas.

martes, 26 de diciembre de 2006

Nuevos Comienzos y Muchas Felicidades

A escasos días del comienzo de un nuevo año calendario se me ocurren muchos comienzos posibles...

Por ejemplo, debemos comenzar el nuevo año con grandes esperanzas de ser más felices. Esperanzas de mejor salud, de más tranquilidad, de una mayor estabilidad económica, de mejores condiciones habitacionales en el pueblo y de una menor pobreza entre todos. Sin esperanza no vale la pena vivir, por eso debemos terminar el año y empezar el próximo con grandes esperanzas.

Debemos también empezar el año (y terminar el actual) con grandes agradecimientos. Debemos estar agradecidos por la vida (“Gracias a la vida, que me ha dado tanto” canta Mercedes Sosa), por los muchos momentos alegres que nos trajo, por las ocasiones en que simplemente pensamos que era bueno estar viviendo, teniendo amigos/as y compartiendo con ellos/as, por nuestros hijos/as y familiares, por las bendiciones recibidas y las oportunidades encontradas. Si usted piensa en cuanto a cómo era usted hace un año y descubre que está mejor hoy que hace un año, entonces dé muchas, pero muchas gracias.

Terminemos el año y empecemos el otro haciendo el bién. Ofrezca algo significativo a una familia pobre, no como el regalo que se da a un mendigo, sino como una ofrenda de simple dignidad humana, conociendo que el que da se beneficia más que él que recibe. Hay tantas necesidades en nuestra comunidad. Páguele una comida a alguien, llévele una compra de comida a una familia o pareja pobre, compre libros o juguetes a unos niños o niñas, siembre un árbol o un jardín, páguele a alguien para que recoja la basura en alguna esquina del pueblo que tanto lo necesita y, sobretodo, haga el bien sin mirar a quien.

Comenzemos el año agradeciendo todas las cosas buenas que la Madre Tierra nos trajo en el 2006 y pidamos grandes cosas para el 2007, manifestando una consagración a mantener al medio ambiente en la mejor manera posible. Nuestra calidad de vida aumenta en la manera en que preservamos nuestros recursos naturales. La conexión humano-naturaleza es sumamente poderosa y estabilizadora y la misma debe ser fomentada y sostenida cada día del año que comienza.

Empecemos el año fomentando el mayor desarrollo cultural y artístico para la comunidad. Escriba, cante, recite poemas, visite galerías, compre obras de arte, auspicie a los artistas locales, fomente al desarrollo cultural y artístico en las escuelas, apoye iniciativas para el arte y, por qué no, conviértase usted en un artista! Las artes humanizan y edifican. ¡¡Que nos entre el 2007 con mucho arte!!

Por encima de todo, comencemos haciendo del 2007 el año de la familia. Hay tantas familias desgarradas por tantas cosas. Todos los que vivimos en familia nos enfrentamos con luchas constantes y momentos difíciles. Pero la descomposición familiar en Las Terrenas es desastrosa y carecemos de recursos, personal y organizaciones que den apoyo a los miembros de familia que luchan contra tantos abates existentes en nuestro medio. La niñez y la juventud cuelgan precariamente sobre el hilo de la incertidumbre, de la falta de atención, de una guianza adecuada, de una protección balanceada. Cuando se presenten oportunidades para proteger a los puntas opuestas (las más pequeños y los más ancianos) ayude por favor; cuando se presenten oportunidades para fortalecer a las familias, ayude por favor. Mientras más bendiciones posea dentro de su propia familia comparta más con las que nada tienen o tienen muy poco.

Finalmente, las leyes del país le permiten donar hasta un 5% de sus impuestos a organizaciones sin fines de lucro. En la Fundación Mahatma Gandhi queremos auspiciar y fomentar muchas cosas al igual que comenzar nuevos programas. Sus donaciones serían muy bien recibidas y agradecidas. Igualmente, si hay alguna otra organización comunitaria que merece su atención haga lo propio, lo importante es que usted se haga parte y hecho en el mejoramiento de la comunidad y su donación podría hacer posible muchos de sus sueños y esperanzas.

¡Feliz año nuevo para todos y todas!
¡¡Feliz año nuevo para una de las comunidades más hermosas del mundo, Las Terrenas!!!

lunes, 18 de diciembre de 2006

Reyes Magos Para Las Terrenas

Se acerca la navidad y con ella vienen los regalos.
Aunque muchos puedan desconocerlo, la fiesta de la navidad tiene origen pagano en la fiesta de Saturnalia (diciembre 7-24), un festival romano que incluía el intercambio de regalos, grandes bebentinas, desnudez y exenciones para los esclavos de la época. Siglos más tarde en España se instauró la fiesta de los Tres Reyes Magos el mismo día de la Epifanía (6 de enero), basado mayormente en una leyenda formulada a través de los tiempos ya que las Escrituras ni hablan específicamente de tres magos, ni identifica sus nombres, ni detallan los muchos elementos con los que se les identifica hoy en día. En otras palabras, celebramos la navidad en base a una tradición secular unida al sincretismo religioso particular de la orientación católica romana.
Sin importar su origen la navidad nos trae regalos y nosotros, los que vivimos en Las Terrenas nos hacemos la pregunta, ¿qué nos dejará el “niño Jesús” o “los reyes magos”? Yo quiero compartir algunos deseos para Las Terrenas, a ver si me premian con los mismos.
El primero y mayor de los regalos que Las Terrenas pudiera recibir sería un ayuntamiento con una visión organizacional clara de lo que hay que hacer en los próximos cuatro años. Una visión es una concepción abierta y amplia de lo que se aspira para una organización o comunidad. ¿Cómo se construye una visión? Hay tres maneras: primero, autocrática o autoritativa (ejemplo: sólo el síndico sabe lo que debe ser y así lo dispone, de tal forma que sólo el síndico pone y dispone); segundo, selectiva (ejemplo: el síndico, la junta municipal y sus actuales asesores dominicanos y franceses disponen de lo que hay que hacer, lo que resulta en acciones y decisiones basadas en la participación de sólo unos pocos, generalmente los que gozan del favor del síndico o los que han hecho grandes contribuciones financieras a su labor electiva o administrativa); y tercero, participativa o solidaria (ejemplo: un proceso abierto de participación ciudadana, participación técnica y/o enfocada, dando paso a que todas los grupos interesados desde el ciudadano común hasta los grupos interesados puedan tener voz en el proceso). Estoy convencido que la mejor visión sólo la produce un proceso participativo y solidario, pero tengo pocas esperanzas de recibir este regalo porque en los primeros 130 días del ayuntamiento sólo se han visto acciones autocráticas y selectivas y no se ha anunciado ni proseguido con ningún tipo de proceso participativo.
Después de una visión clara, el mejor segundo regalo para Las Terrenas sería un plan estratégico de corto y largo plazo, dirigido a dos cosas: primero, detalles de cómo el ayuntamiento se apresta a cumplir con los puntos definidos por la ley orgánica municipal (ejemplos: basura, ordenamiento municipal, manejo de áreas, servicios básicos, transparencia gerencial y financiera, etc.); y, segundo, detalles de las áreas de desarrollo o de innovaciones a través de las cuales el ayuntamiento espera ampliar y/o mejorar lo existente, o lo que piensa crear como nuevas ofertas para sus munícipes. En el momento presente nadie sabe si existe un plan, o cuáles son los puntos del plan, o en qué dirección estratégica va ese plan.
“Estrategia” simplemente define que se esperan cambios específicos (siempre se aspira a mejorar las cosas), en áreas pre-determinadas (no al adrede), a través de procesos selectivos (el síndico no es ni ingeniero ni planificador urbano, por lo que debe depender de técnicos y especialistas en la manera de lo posible, por lo que sólo los procesos relevantes serían los más efectivos) y con recursos tangibles (lo que demanda de una gerencia realista, transparente y comedida).
El mejor tercer regalo para Las Terrenas es un plan de negocios efectivo para el manejo de la basura, porque estoy convencido de que la basura y su manejo (no solamente la recogida) constituye el factor más importante y crítico para el éxito gerencial y de servicio en nuestra comunidad. Un manejo adecuado de la basura podría aportar al ayuntamiento igual o mayores recursos que los que recibe de la Liga Municipal Dominicana, aparte de ayudar a mejorar lo que probablemente constituye el problema principal desde el ángulo turístico, desde la playa hasta Caño Seco, pasando por todos los barrios y carreteras. Continúo insistiendo que la basura es la mayor fuente de riquezas potenciales y que debe ser vista como un haber financiero y no como un problema. Es como si el municipio contara con miles y miles de coco para vender, cada una con un valor de $20, de tal manera que cada vez que se tumban cocos el municipio se gana (después de cubrir sus gastos) $10 en cada coco. Lo que eso quiere decir es que cada casa, institución o empresa es una mata de basura y que un plan de negocios efectivo podría no sólo ofrecer un servicio moderno y adecuado para la recogida y manejo de la misma, sino también grandes ganancias para beneficio de todos los munícipes.
Que no quepa duda de que todos los munícipes estamos interesados en un ayuntamiento eficaz, transparente y exitoso. Nadie se levanta por la mañana para prenderle velas a San Quintín pidiendo que el Lic. José Alexis Martínez fracase en su gestión. Ese fracaso no beneficia a nadie, ni al mismo síndico, ni al PLD, ni a la comunidad. Lo que todos deseamos para esta navidad y para el futuro es un ayuntamiento exitoso (Dios nos libre de una gerencia como la anterior). Pero es muy probable que el mismo síndico sea su peor enemigo, prefiriendo procesos y acciones autocráticas o selectivas a procesos participativos y de inclusión. Dentro de cuatro años el síndico podrá mirar hacia atrás, al 2006 o 2007 y definir dónde estuvo la fuente de su éxito o de su fracaso. Por eso es que en esta navidad deseamos otro regalo, un regalo específicamente para el Lic. José Alexis Martínez: el que todas las fuerzas del universo le traigan la sabiduría, candidez e inteligencia necesarias para que tome las mejores decisiones para su persona, para su familia y para su comunidad.

martes, 12 de diciembre de 2006

Alfabetizar, "Yo, Sí Puedo"

“Yo, Sí Puedo” es un programa cubano destinado “a acabar el analfabetismo en el mundo.” A principios de este año, la Fundación Mahatma Gandhi había decidido auspiciar proyectos de alfabetización como programa adjunto a la operación de la Biblioteca Comunitaria Anacaona y ahora, junto a la Comisión de Seguimiento como comité gestor, hemos enfocado la meta de “cero analfabetismo en tres años” en Las Terrenas y zonas aledañas.
¿Por qué atacar al analfabetismo? Porque a nivel mundial el analfabetismo literal y numérico impide a las personas echar para adelante y las condena a permanecer en los niveles más bajos de estratificación social. La incapacidad de leer, escribir y sumar limita la obtención de una mejor preparación o entrenamiento, impide la búsqueda de mejores empleos y condena al individuo a una vida de pobreza irreparable.
La pobreza se define como la privación de las cosas valiosas que una persona pueda ser o hacer. La pobreza no se refiere solamente a la falta de ingresos sino a un grupo de factores que disminuyen la calidad de vida y previenen que el individuo ejerza derechos y beneficios que la sociedad le otorga. Una persona con bajos ingresos puede vivir una vida relativamente satisfactoria si goza de buena salud, tiene acceso a bienes y servicios adecuados y si su educación le permite mantener un empleo seguro y estable. Pero una persona con bajos empleos y que no pueda leer no podrá disfrutar del mismo bienestar porque está limitado en su capacidad de acceder bienes y servicios y, además, su empleo también estará limitado. El saber leer y escribir abre puertas, el no saber leer y escribir cierra puertas; el saber leer y escribir permite soñar con posibilidades de mejora, pero el no saber leer y escribir elimina la posibilidad de soñar con lo posible, quedándose la persona en la pesadilla de lo que no se puede cambiar.
En el mundo existen más de 771 millones de analfabetos absolutos, el 98,5% de los cuales se concentra en los países del Tercer Mundo, sin contar los que se van sumando por la falta de atención escolar en las edades tempranas de la enseñanza básica, donde más de 130 millones de niños están fuera de las escuelas.
El índice de analfabetismo de menores en la República Dominicana es relativamente alto. Según la UNICEF el 15.6% de los menores entre 10 y 17 años no saben leer ni escribir, y sólo 25 de cada 100 adolescentes entre 15 y 17 años han cursado la escuela secundaria. Aunque otras estadísticas indican que un 85% de la población sabe leer y escribir la realidad es que más de la mitad de éstos no completaron el nivel primario lo que sugiere que muchos de ellos podrían ser analfabetos funcionales, con grandes impedimentos en la lectura y escritura.
La alfabetización de un pueblo, tanto como el hecho educativo mismo, es un acontecimiento político cuyo éxito depende de la participación masiva y unánime de todas las organizaciones existentes y de todos los sectores de la población. Por eso es que estamos invitando a todas las personas de conciencia y con interés a que asistan el lunes 11 de diciembre al taller de entrenamiento sobre cómo utilizar el programa “Yo, Sí Puedo” para alfabetizar individuos y grupos. El método consiste de 65 clases de 30 minutos que pueden darse por televisión o usando televisor y VHS. El método ha sido responsable de alfabetizar a cerca de 1.4 millones de venezolanos desde el 2003 y en octubre del año pasado Venezuela fue declarado “territorio libre de analfabetismo.” En febrero pasado el programa entró en Bolivia (la nación más pobre de sudamérica) donde se espera que un millón de bolivianos aprendan a leer y a escribir y así erradicar el analfabetismo en 30 meses, mayormente entre las clases indígenas y pobres. En todo el mundo más de 2.5 millones de personas han aprendido a leer y a escribir usando el mismo método y, aquí en Las Terrenas, esperamos convertir a nuestro pueblo en el primer territorio dominicano libre de analfabetismo para enero del 2010.
Si quieres ser parte de este proyecto, único en el pais, comunícate con la Fundación Mahatma Gandhi llamándome al 809.386.3086 y esperamos poder verte el lunes a partir de las 9 a.m. en la Biblioteca Comunitaria Anacaona.

Sísifo y el Fénix

  LA DESGRACIA DE SÍSIFO Y LA PROMESA DEL FÉNIX (Escrito en el 2009) Todo el mundo tiene una idea de lo que se debe hacer en Las Terrenas. T...