Mostrando entradas con la etiqueta igualdad social. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta igualdad social. Mostrar todas las entradas

viernes, 12 de noviembre de 2021

En la Biblia no hay igualdad



EN LA BIBLIA NO HAY IGUALDAD

No se puede debatir la igualdad de los sexos (biológico), ni la complejidad de los géneros (sociológico), ni la inclusión o equidad social, usando la Biblia. Esta es un texto sagrado muy valioso, teológico, histórico y socio-cultural, escrito por patriarcas, bajo un patriarquismo, para los patriarquistas, dentro de un contexto patriarcal.
En la Biblia judeo-cristiana hay argumentos de todo y para todos.
Argumentar asuntos de género y sexo utilizando la Biblia requiere una hermenéutica y una exégesis fuera del alcance de la gran mayoría de los feligreses y de los ministros religiosos.
Si su fé demanda obediencia ciega a las interpretaciones de su iglesia o de su ministro entonces no encontrará ni igualdad ni equidad de género porque eso no existe como tal en la Biblia judeo-cristiana. Es contraproducente demandar equidad e igualdad de una fuente patriarcal.
Creer en la equidad y en la igualdad entre sexos y géneros requiere textos, estudios, comprensiones e investigaciones extra-bíblicas, que sólo creyentes de mentes y espíritus abiertos podrían aceptar.
La mayoría de los creyentes tienen un entendimiento frizado del evangelio. Y los que no, tienen que aceptar con dolor o con pesar, que el Libro sagrado de mayor relevancia en el Occidente fue escrito con la idea expresa de que la mujer es segunda o tercera clase ante Dios y los hombres.
Las personas de formación judeo-cristiana que aceptan equidad e igualdad entre sexos y géneros lo hacen extrapolando principios bíblicos y estirando conceptos para ajustarlo a una percepción socio-cultural más justa. Esos son la minoría.
Algunos creemos en un Ser Superior que no se ajusta a las limitaciones de nuestros entendimientos y que existió y existirá antes y después del patriarcado teológico, socio-cultural y político, sin estar sujeto a éste.
La violencia de género no procede de que la mujer se vea un reflejo de Dios y, por lo tanto, ni inferior ni sujeta al hombre. La violencia procede de personas con ideas fundamentadas en ese patriarquismo que todavía enseña que el varón es superior y que la hembra debe estar sujeta a él en TODOS los sentidos.

Carta Abierta Para los Concejales

  Carta abierta a los concejales de Las Terrenas CONCEJALES PARA UN FUTURO MÁS CERTERO Por José Bourget, comunitario Querid@s Concejales: Si...